- La gestora del PSOE decide las medidas contra los diputados que votaron en contra de la investidura de Rajoy.
- José Zaragoza y Pere Joan Pons ya han sido apartados de sus cargos de presidente y portavoz de la Comisión Mixta para la UE.
- Los ¿próximos?: Sofía Herranz y Meritxell Batet (dirección del Grupo Socialista), más Margarita Robles y Susana Sumelzo.
- El PSOE prepara un Comité Federal para echar al PSC de la dirección.
El
PSOE se 'podemiza'. Es decir, lleva la lucha cainita y marxista a su vida interna. Pues es propio del marxismo llevar la división y el odio allí donde se encuentra, incluís dentro de sí mismo.
Pues bien: en esa situación de división es en la que se encuentra el partido ahora mismo. La gestora del PSOE, que preside
Javier Fernández, se reúne hoy jueves para decidir qué medidas adopta contra los diputados que votaron en contra de la investidura de Rajoy. Los Estatutos del PSOE consideran falta "muy grave" la "actuación en contra de acuerdos expresamente adoptados por los órganos de dirección del partido". En todo caso, las medidas disciplinarias sólo afectarían a seis de los quince parlamentarios "díscolos", ya que sobre los siete diputados del PSC y las independientes Margarita Robles y
Zaida Cantera la gestora no puede imponer el procedimiento estatutario.
Los diputados
José Zaragoza y Pere Joan Pons, que rompieron la disciplina de voto, fueron apartados ayer de sus cargos de presidente y portavoz, respectivamente, de la Comisión Mixta para la UE. Sus puestos serán ocupados por Soraya Rodríguez y Eduardo Madina. La gestora podría decidir hoy jueves apartar a
Sofía Herranz y a Meritxell Batet de la dirección del Grupo Socialista, así como a
Margarita Robles y a Susana Sumelzo de sus puestos en comisiones.
A todo esto, el exsecretario general del PSOE
Pedro Sánchez pidió a la gestora, en un mensaje publicado en su página de Facebook, que actúe "en aras de la unión" y no retire de portavocías y presidencias de comisión en el Congreso a los diputados que rompieron la disciplina de voto en la investidura de Mariano Rajoy. En su opinión, esto "no hace más que ahondar en la fractura que sufre" el partido. Mientras que el exsecretario de Organización César Luena criticó que la gestora imponga "castigos" y preguntó si "esto es coser".
Más leña metió el expresidente del Gobierno
Felipe González, quien cree que Pedro Sánchez está más interesado en su propio partido que en la situación de España. "No estoy seguro de que pueda hablar sobre qué se puede hacer por España durante más de media hora", declaró en una entrevista difundida en el último número de la revista francesa Politique Internacional.
Pero la cosa no queda ahí pues, según informa este jueves el diario
La Razón, la gestora estaría sopesando la convocatoria de un
Comité Federal, el máximo órgano del partido entre Congresos, para aprobar las directrices que regirían a partir de ese momento las relaciones con el
PSC y que pasarían por dejar a los socialistas catalanes fuera de la
Ejecutiva Federal y, sobre todo, del proceso de elección de un candidato a la Secretaría General en primarias.
Aunque
esta propuesta permitiría al PSC seguir formando parte del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso y en el Senado y que sus militantes participaran en la elección del candidato del PSOE a la Moncloa.
Lo dicho: el PSOE se podemiza.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com