- Inicia una consulta pública hasta el 8 de diciembre para las exigencias que aplicará desde enero.
- Es otro gesto más sobre las indicaciones que ya dio en marzo para reducir los préstamos dudosos y la morosidad.
- Las exigencias de cobertura varían según la parte asegurada (siete años) o no asegurada de los créditos (dos años).
El
Banco Central Europeo (BCE) ha iniciado una
consulta pública, hasta el próximo 8 de diciembre, para concretar nuevas exigencias a los bancos sobre los
préstamos hipotecarios que se contraten y los niveles mínimos de "
provisiones prudenciales" por los nuevos que se aplicarán a partir de enero de 2018.
El banco que preside
Mario Draghi (
en la imagen) explica en un
comunicado que se tendrá en cuenta una serie de elementos, como la
duración del crédito pendiente y la valoración de la parte
asegurada (la vivienda, que en condiciones normales supone el 80% de valor) y la
no asegurada.
En concreto, el BCE espera de los bancos "proporcionen
cobertura completa" para la parte no asegurada de los nuevos créditos después de
dos años como muy tarde, y de siete años para la parte no asegurada o dudosa.
Sobre ese esquema, espera que los bancos expliquen cualquier desviación,
mientras el BCE endurecerá la vigilancia a través de sus mecanismos de
supervisión.
Se trata, en realidad, de una nueva vuelta de tuerca sobre las
orientaciones de marzo de 2016 sobre los préstamos incobrables y las medidas para reducir la
morosidad, con estrategias concretas.
El BCE destaca que, a pesar de los esfuerzos hechos hasta ahora, no todos ellos están igual: algunos "todavía necesitan mejorar". Por tanto, seguirá adelante con la supervisión, "de cerca", para comprobar los avances, la reducción de riesgos y las provisiones necesarias.
La entidad celebrará, además, una audiencia pública, en el marco de esa consulta, el 30 de noviembre.
Rafael Esparza