- Son posiciones especulativas a la espera del proceso de concentración en Europa, el mismo que ya ha habido por países.
- El ex presidente de Telefónica quiere, como el fondo Warburg Pincus, poner un cuarto operador en condiciones.
- Euskatel está condenada a ser una operadora menor, para el norte, pero eso no detiene a Alicia Koplowitz o a Bestinver, gestora de Acciona.
Sobre el sector de las
telecos en España
empieza a planear una burbuja en toda regla, que es lo que pasa cuando se especula con el valor de los activos, inflándolos, y alejándolos de la capacidad de generación de recursos. Sólo de ese modo se entienden el interés de fondo
Warburg Pincus o del ex presidente de Telefónica
Juan Villalonga por hacerse con
Yoigo y
Masmovil o que hayan entrado en el capital de
Euskaltel la gestora de Acciona,
Bestinver, o
Alicia Koplowitz, a través de la Sicav que controla, Morinvest.
No son los únicos pasos en un mercado
bastante definido con el principal operador,
Telefónica, al que han seguido, para crecer,
Vodafone, con la compra de
ONO, y
Orange, con la adquisición de
Jazztel.
Es el proceso de concentración al que aboca un mercado con demasiados actores, que no afecta sólo a España, sino a Europa en su conjunto.
Si el futuro apunta a lo que ha ocurrido en mercados homogéneos, como EEUU, se repetirá la misma tendencia en Europa, donde existen demasiadas telecos, tanto en el
plano nacional como en el continental. Mientras en EEUU hay tres grandes operadoras, en Europa superan las 200.
¿Hay sitio para más, por tanto, y en España? No parece desde el punto de vista del beneficio que puedan generar y ese es precisamente el problema que
Euskaltel por su limitación geográfica. Por eso compró la gallega
R y aspira a hacerse con la asturiana
Telecable. ¿Para convertirse en la operadora de norte de España? Eso como mucho, y no parece suficiente.
Son las mismas razones por las que
Teliasonera puso en venta
Yoigo o por la que
Masmovil necesita crecer (de lo contrario no podrá competir con las tres grandes). Sitúen en ese plano la
negociación de Warburg Pincus para comprar Yoigo y Masmovil, de la que informó
Hispanidad la semana pasada, el 25 de enero. El objetivo del fondo de capital riesgo es fusionar las dos compañías, comprando la totalidad de 100% de
Yoigo y una participación suficiente de
Masmovil. La unión de ambas daría la posibilidad de un cuarto operador.
El mismo propósito mueve a Juan Villalonga, como les contamos este martes, 3: comprar Yoigo y Masmovil. Para ello también prepara una oferta por las dos compañías. Le
ayuda, además,
Ana Botín. El Santander es el banco encargado de vender Yoigo. Para Villalonga sería la oportunidad de volver a España, con su fondo
Hermes Growth Parfners.
Si las dificultades para competir de Yoigo y Masmovil son grandes,
para Euskaltel, más. Pero eso no evita que los inversores tomen posiciones… especulativas.
Bestinver ha invertido seis millones de euros en el último trimestre y Morivenst, dos millones.
No son los únicos en la operadoras vasca en la que
Kutxabank es accionista de referencia, con el 25%. Añadan a esa lista
Corporación Alba (10%),
Abanca (5,7%),
BlackRok (5,12%),
Franklin Resources (4,18%) y otros, con menor presencia como Artemis Investments, Artisan Partners, Marshall Wace o Mutuactivos.
Rafael Esparza
rafael@hispanidad.com