- Y no sólo fusiones: el conflicto separatista frena cualquier operación de calado.
- Las entidades caen en bolsa mientras sube la prima de riesgo.
- Y Danièle Nouy aprovecha la situación para llamar a las entidades a fusionarse.
Empezando por el final, a la presidenta del
Mecanismo Único de Supervisión (MUS), la entrañable Danièle Nouy, no le gusta la banca española y menos aún si hablamos de entidades pequeñas o medianas. No, el anhelo de Nouy es que el
sector bancario español se reduzca a dos o tres súper entidades dispuestas a entrar en el juego de las fusiones paneuropeas.
Pero no se engañen, en ese contexto las entidades españolas se llevarían la peor parte. Dicho de otra manera, ante una hipotética fusión, por ejemplo,
entre el BBVA y el Deutsche Bank, la entidad alemana se llevaría el gato al agua a pesar de capitalizar unos 29.500 millones de euros frente a los 48.300 millones del BBVA.
Es sólo una hipótesis, aunque
lo cierto es que la presidenta del MUS ha mostrado en más de una ocasión su 'simpatía' hacia la banca española. De hecho, no desaprovecha ninguna ocasión para llamarlos a fusionarse. Ahora bien, sabe que mientras las entidades vayan bien, sus llamamientos tienen unas posibilidades de éxito muy reducidas. ¿Para qué fusionarme si puedo seguir en solitario?
Por ejemplo,
Liberbank, que lucha por mantener su independencia y negocia con el fondo
Cerberus venderle una participación de entre el 7% y el 10% tras la ampliación de capital de 500 millones que el banco espera cerrar a mediados de noviembre, tal y como publica Expansión. Por cierto, recuerden que la entidad que preside Manuel Menéndez goza, hasta finales de noviembre, del periodo de gracia de la
CNMV para librarle de ataques bajistas en bolsa.
Es decir, mientras el sector financiero español funcione, Nouy tiene poco que decir. Ahora bien, el conflicto catalán ha paralizado al sector y eso no es bueno. Las entidades no quieren tomar decisiones de calado -mucho menos abordar fusiones- mientras continúe la incertidumbre política. Una incertidumbre que se refleja en bolsa -Sabadell (-1,6%) y Santander (-1,2%) son los bancos que más caen- con un Ibex que pierde cerca del 0,8% a tres horas del cierre de la sesión.
La prima de riesgo también se ha resentido y ha subido hasta los 127,8 puntos básicos al comienzo de la sesión (luego se ha estabilizado en los 123,5 puntos), frente a los 122,5 a los que cerró el miércoles.
Y es precisamente este contexto, que podría desencadenar una nueva crisis financiera, el que utiliza Nouy para animar a las fusiones. Como vais mal, debéis fusionaros.
Y cuando lo hayáis hecho, iremos a por las fusiones paneuropeas.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com