Pedro Sánchez es víctima de su puritanismo hipócrita. Liquidó a propios y extraños con sus másteres y ahora él es liquidado con su tesis. ¿Qué esperaba?

La verdad es que una tesis doctoral es algo mucho más importante que un trabajo de fin de máster. Y todo ello mucho más grave que una discrepancia con Hacienda, subsanada mediante el correspondiente pago, motivo de la caída de Màxim Huerta, una semana como ministro más transitorio de la historia democrática. Pero con tal de pasar por don Limpio, Pedro Sánchez lo sacrificó… como ahora ha sacrificado a Carmen Montón para aparentar

Es que el PSOE colocó el listón muy alto. Nada de eso: el puritanismo consiste en habéis colocado el listón donde no debería haber listón alguno, en exagerar un detalle de la moral hasta convertirlo en el objetivo final y único. Traducido: la ética no consiste en dimitir si plagias, la ética consiste en no plagiar.

Y también significa que el mayor de los pecados no puede consistir en citar o no citar en un trabajo universitario o en una tesis. Sí, es importante no apropiarse de los conocimientos de los demás, pero eso no puede ser el pecado más grave, ¿verdad?

Ahora bien, lo de Sánchez no solo es puritanismo. Es, además, hipócrita: ¿Por qué exigirle a Casado que dé explicaciones sobre un máster de fin de carrera y negarse a proporcionarlas él sobre su tesis doctoral? 

Sí, es puritanismo hipócrita, pero tiene algo bueno: está proporcionando al noble pueblo español un gratificante divertimento en horas de tedio y melancolía como las de ahora mismo. En efecto: la clase política española se ha convertido en la historia de los Diez Negritos. ¿Quién será el siguiente en caer?