En la transición energética es importante la visión de las empresas eléctricas, como es lógico, y así se ha reflejado en la primera mesa redonda del I Congreso Aelec, dedicado al tema de ‘Electrificación y redes: binomio para la transición energética’. Viesgo, Iberdrola, EDP, Naturgy y Endesa han mostrado su apoyo al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), pero han pedido regulación, reforma fiscal y también de los precios de la luz.

Miguel Antoñanzas, presidente y CEO de Viesgo, ha señalado que “los objetivos son exigentes y creo que alcanzables”. “La sociedad tiene que entender y abrazar ese cambio, donde los protagonistas son los consumidores”, ha añadido.

Ángeles Santamaría, CEO de Iberdrola España, ha destacado que “nuestras redes son un caso de éxito, la calidad de servicio ha mejorado y el coste medio para el cliente es un 40% inferior al de la media europea”. Por tanto, “el punto de partida es muy bueno para abordar el futuro y además, desde 2011, la retribución de la distribución no ha subido”. Pero el gran reto es que las inversiones necesarias se produzcan y podría haber una lucha por la inversión.

Por su parte, Rui Teixeira, CEO de EDP España, ha subrayado que el 95% del consumo energético viene por electricidad. “Es un plan ambicioso, pero lo será aún más y no sólo en el sector eléctrico”, ha afirmado. No se ha olvidado de lo importante que es la garantía de suministro, dado el cierre de tecnologías convencionales y la aparición de otras nuevas, porque “la realidad de las renovables es intermitente” (y es que no producen las 24 horas, los 365 días del año).

El gran reto es que las inversiones necesarias se produzcan y podría haber una lucha por la inversión

Rosa María Sanz, directora general de Infraestructuras EMEA de Naturgy, ha elogiado que en España ya se hayan implantado contadores inteligentes en más de 28 millones de hogares, mientras que Reino Unido no acabará el proceso hasta 2020. Asimismo, considera clave la tecnificación de la red y su digitalización, permitiendo la evolución hacia una plataforma virtual, donde también entren temas como el big data, la ciberseguridad, etc.

José Casas, director general de relaciones institucionales y regulación de Endesa, ha destacado que el sector de la electricidad ya está haciendo sus deberes, según refleja el balance de emisiones de 2018 publicado por el Ministerio de Transición Ecológica: “la electricidad ha sido capaz de reducirlas un 18%, mientras el transporte y la industria las han incrementado”. Asimismo, considera que la luz debería incrementar su peso, pero la barrera que tiene es el precio, pues “no es justo que se le obligue al consumidor a pagar 5.800 millones de las primas a renovables ni a pagar el déficit de tarifa que han generado esas primas” ni tampoco que los productores paguen 1.200 millones por la cogeneración.

En cuanto a los elementos que pueden facilitar la transición, Antoñanzas ha destacado la búsqueda del consenso y la regulación (dado que la tecnología siempre va por delante). Santamaría ha abogado por una regulación “que mire con las luces largas”, pues para electrificar hay que descarbonizar, y Sanz ha apostado por una regulación flexible que pueda adaptar las innovaciones que vayan a surgir y por incentivos para desarrollar e incorporar los avances tecnológicos”. Por su parte, Teixeira ha pedido una reforma fiscal y Casas ha ido más allá, reclamando una “reforma estructural de los precios de la electricidad”.