Lo que nos cuenta entender la guerra del siglo XXI. Mientras el presidente norteamericano, Barack Obama, hablaba de misiles y fuerza de intervención rápida en el este de Europa (grave error) en Dallas, no soldados, sino civiles; no extranjeros, sino norteamericanos; le asesinaban a cinco policías -balance provisional- porque no le gustaban (o les gustaban, que poco sabemos aún de los hechos) lo mal que se comportaban con los negros. Esta es la guerra del siglo XXI, la III Guerra Mundial. Son homicidios en todo el globo, también en los países que no están en guerra. Los motivos son variados y, sobre todo, no se trata de un ejército que se enfrenta a otros sino de terroristas que se esconden tras la sociedad civil. No tiene fácil solución. No es una guerra de misiles sino de fusiles, pero muchos fusiles pueden matar más que algunos misiles, sobre todo si la explosión de violencia es mundial. Y resulta que en el siglo XXI, lo es. Ojo y el principal responsable, al menos por el momento, Micah Johnson, ni pertenecía a ningún grupo terrorista ni tan siquiera tenia antecedentes penales. Era un tipo con muy mala leche y se dedicó a asesinar al que no le resultaba simpático. O sea, que más nos vale rezar. Hispanidad redaccion@hispanidad.com