Cinco hermanas de las Misioneras de Marta y María, una orden religiosa de la diócesis de Issele-Uku, fueron secuestradas en el estado de Delta, en el sureste de Nigeria. Según las noticias enviadas a Agenzia Fides, el 25 de octubre algunos hombres armados interceptaron el vehículo de las monjas que regresaban de un funeral cerca de Agbor, a 40 kilómetros al oeste de Issele-Uku. Los asaltantes dispararon para detener el vehículo y algunas balas alcanzaron al menos a dos de ellas en las piernas. Raptaron a otras cinco religiosas.

En declaraciones a la prensa local, un sacerdote de la diócesis de Issele-Uku aseguró: “Rezad por la liberación de las cinco religiosas capturadas en Agbor y por las otras dos hermanas que estaban en el mismo vehículo y que fueron disparadas en las piernas”.

El secuestro de las religiosas es solo el último de una serie de incidentes similares que llevan ocurriendo desde hace tiempo en el estado del Delta y en otras áreas del sureste de Nigeria. Un sacerdote de la misma diócesis de las secuestradas, de Issele-Uku, incluso ha sido raptado dos veces. El padre Andrew Anah, párroco de la Iglesia del Sagrado Corazón en Obomkpa, fue secuestrado por segunda vez el 5 de junio y luego liberado a principios de julio. La primera vez que se lo llevaron fue en 2017 y fue puesto en libertad unos días después.

En la India, un médico cristiano es arrestado por una supuesta ‘conversión forzada’ de una niña

En la India, un médico cristiano fue arrestado por la policía de Jharkhand con la acusación de haber convertido (de hinduísmo a cristianismo)  por la fuerza a una niña de 13 años, a través de un ofrecimiento de dinero. El arresto sucedió en Pakur, después de la denuncia presentada por el padre de la menor el día antes. Sajan K George, presidente del Global Council of Indian Christians (GCIC), condenó “el arresto del cristiano, realizado según el Jharkhand Freedom of Religion Act (la ley anti-conversión en vigor en el Estado). Tenemos sospechas sobre el arresto, dado que recientemente Jharkhand es un semillero de persecuciones contra los cristianos”, recoge Asianews.

Según Sajan K George, el arresto es “sospechoso” porque Jharkhand es uno de los siete Estados indios en el cual está en vigor la ley anti-conversión. Por otro lado, agrega, “seis de estos Estados son gobernados por el BJP (Bharatiya Janata Party, nacionalistas hindúes).

A la luz de todos estos episodios, concluye: “Este último arresto es la prueba de que las molestias sistemáticas conducidas contra los cristianos en Jharkhand tienen como objetivo el polarizar a la sociedad a través de líneas sectarias, en vista de la vigilia de las elecciones generales del año próximo. Ellos (los radicales hindúes) quieren hasta dividir a la población tribal, sembrar la discordia en el tejido social por intereses políticos”.  

Pakistán: los católicos protestan por los ataques contra la fe cristiana y los símbolos religiosos

En Pakistán, los cristianos de Karachi organizaron una protesta pacífica contra los ataques contra la fe cristiana y los símbolos religiosos. Hicieron saber a las instituciones que millones de cristianos se han sentido ofendidos y heridos por publicaciones recientes de los medios de comunicación paquistaníes. Según lo recogido por la Agencia Fides, la manifestación pacífica, encabezada por la archidiócesis de Karachi y la Comisión Nacional Justicia y la Paz (NCJP), comenzó con este himno: “La cruz es un símbolo de fe, fortaleza y victoria, gloria, éxito y vida eterna”. Cuidado con el nacionalismo político-religioso hindú.

El padre Saleh Diego, vicario general de la archidiócesis de Karachi y director de la Comisión Diocesana Justicia y Paz, explica a Fides: “Protestamos contra los medios de comunicación por publicar imágenes despectivas que dañan los sentimientos religiosos de los cristianos. La imagen del crucifijo en una viñeta satírica hiere profundamente nuestros sentimientos religiosos”.

Y añade: “Todas las minorías religiosas en Pakistán se felicitan por la reciente decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que estableció que insultar al Profeta no es parte de la libertad de expresión. Las religiones deben tener el mismo respeto y los mismos derechos”. El Vicario agrega: “El crucifijo es un símbolo de nuestra fe. Nuestra fe no está completa sin la Santa Cruz, nos recuerda a nuestro Señor Jesucristo y su gran sacrificio por cada persona en el mundo. No podemos tolerar que se insulte”.