La solución, le aconsejan a España los alemanes -con el ministro federal de finanzas a la cabeza, Wolfgang Schäuble a la cabeza- (en la imagen), holandeses y fineses, está en continuar con las reformas para reducir el déficit público.

Lo cual es muy cierto. Como repite Mariano Rajoy, no se puede gastar más de lo que se ingresa. Lo malo es que tanto las familias como el Estado han gastado más de lo que ganan, pero es el Estado quien obliga a las familias a apretarse el cinturón mientras él se lo aprieta muy poquito y las familias no pueden obligarle a que se lo apriete más.

Pero, sobre todo, el consejo dice la verdad pero no toda la verdad. El problema de España no es que no haya abordado reformas, es decir, que no se haya apretado el cinturón. El problema es que todo lo que ahorramos los españoles, con muchos sacrificios, se contrarresta de inmediato con los intereses que pagamos por nuestra deuda pública. El problema de la Eurozona es que tiene una moneda común pero no es una unión  monetaria.

El Gobierno baja los sueldos a costa de subir el IRPF para poder pagar la deuda que cobran nuestros consejeros.

Y además, es un consejo interesado: los alemanes, bancos y fondos, son los que más ganan invirtiendo en deuda española a alto interés, la misma que está extorsionando a los españoles. Aquí lo que hay es mucha cara.

Alemanes, holandeses, finlandeses: lo que tenéis que hacer es dejar de sangrar a los países sureños y hacer una unión monetaria simétrica. No puede ser que haya una sola máquina de hacer dinero -que, encima, controla Alemania-, una moneda común para todos… y 17 Tesoros emitiendo deuda a precios tan dispares.

España tiene que reducir su déficit y lo está haciendo con un sacrificio tremendo de los españoles, pero vosotros, alemanes, holandeses y fineses, tenéis que dejar de extorsionar a nuestros socios monetarios.

Que lo que tenéis es mucha cara.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com