Gracias por tratar de aclarar que el papel del psicólogo durante las tragedias como la del Metro de Valencia no es la de suprimir o eliminar el dolor. No es ese nuestro objetivo. Sin embargo, como profesional de la Psicología, he echado de menos que aclare cual es nuestra misión en estos casos, que se resume en tratar de prevenir que los afectados desarrollen futuros trastornos de estrés postraumático o duelos patológicos. La mayoría de las personas se reponen por si mismas y con la ayuda de sus familiares y amigos, sin embargo algunas personas elaboran mal estas trágicas experiencias y terminan desarrollando trastornos que afectan muy negativamente a su salud y bienestar.
Por eso es muy importante la intervención desde el mismo momento que se produce la catástrofe, buscando que las personas expresen sus sentimientos, elaboren cognitivamente los hechos, se acepte como normal el malestar que se sufre momentáneamente, se anticipe que ese malestar irá disminuyendo con el tiempo y se avise que si pasado un mes se mantienen ciertos síntomas debería acudir a un psicólogo para recibir tratamiento para evitar que se cronifique el malestar.
Los psicólogos podemos detectar cuales son las personas potencialmente más vulnerables a terminar sufriendo problemas, interviniendo especialmente con estos individuos inicialmente y facilitarles también información sobre los recursos asistenciales públicos y privados que existan en su comunidad para que pueda acudir a ellos en el futuro si los necesita. Desgraciadamente este campo de actuación del psicólogo todavía está poco profesionalizado, ya que hay escasos psicólogos contratados en los servicios de emergencia. Las actuaciones suelen ser voluntarias de profesionales que trabajan en otros ámbitos (consultas, servicios de salud mental...). Sin duda, al profesionalizarse la calidad de las intervenciones aumentaría todavía más.
Enrique Martín Coordinador
psicolops@cop.es
