El recurso podría paralizar todos los procesos de fusión abiertos entre cajas de ahorros

 

El PSOE quiere controlar todo el sector ahorro y para ello necesita paralizar la fusión gallega. Feijóo no soporta la prepotencia del gobernador del banco de España, MAFO, quien aseguró que los SIP deben durar 10 años, no dos.
He oído muchas veces a los inspectores el Banco de España presumir de que la institución vivía estaba al margen del Estado de Derecho. Me he acordado de tamaño disparate tras la intervención del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO), en el Club Financiero de Vigo, donde acudió para, dentro de la exquisita neutralidad institucional -¿alguien lo ha dudado?- del supervisor  apoyar al ministro de Fomento, José Blanco, en sus aspiraciones a presidir Galicia y recuperar su autonomía de las manos del PP, al tiempo que para retar al presidente gallego Alberto Núñez Feijóo mediante el boicot -dentro de la más exquisita neutralidad institucional, como creo haber dicho antes- a la fusión entre las dos cajas gallegas: Caixanova y Caixa Galicia. MAFO se ha empeñado -luego diremos por qué- en que no se fusionen, mientras que Feijóo las quiere unidas. Y es que la batalla por las cajas de ahorros, que el PSOE quiere controlar, se juega en Galicia. Se hablará largo tiempo de la intervención de MAFO en Vigo.

Por de pronto, Feijóo se está planteando, y muy seriamente, recurrir la ley del FROB ante el Tribunal Constitucional. Si el fondo de salvamento para un crisis bancaria como la española, que presuntamente no existe, ya encuentra bastante problemas en Bruselas, imagínense lo que ocurriría si el politizado Tribunal Constitucional prestara atención debida al requerimiento del Gobierno gallego: se paralizarían todas las fusiones en marcha -ahora paralizadas por Bruselas y la chapucera vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado- o al menos vivirían, como ocurre con el Estatut catalán, en entredicho. 

Y lo malo es que argumentos jurídicos le sobran a Feijóo. No olvidemos que la ley del FROB asegura al Banco de España la posibilidad de forzar una fusión -MAFO, con su habitual arrogancia, lo dejó claro en Vigo- y colocar a un equipo directivo contra la voluntad de la entidad tutelante.  

Dicho de otra forma, asegura el gobernador, y la ley FROB, que el que manda en esto de las cajas de ahorros es el Banco de España porque es el único guardián de la solvencia financiera de las entidades. Que no le ha temblado el pulso en intervenir Caja Castilla-La Mancha (CCM) y lo mismo le daría intervenir otras.

Pues bien, MAFO miente. En las cajas de ahorros mandan los gobiernos autónomos. Así lo explicita la Ley de Órganos Rectores de Cajas de Ahorros (LORCA) y así lo ratificó el Tribunal Constitucional. Si no gusta, habrá que cambiar la ley, pero lo que no vale es extrapolar de forma interesada la cuestión de la solvencia.

Respecto a la intervención en CCM, decir que ha resultado un churro. En lugar de dejarla caer, se han empleado 2.000 millones de dinero de público en hacerle un regalo a Cajastur con la condición de que terminará por quedarse en casa.  

Más chulerías: No me importan los informes que se realicen, en referencia a los ejecutados en Galicia sobre las cajas gallegas. Olvida MAFO que él también se guía por informes de consultoras porque desprecia a sus propios efectivos pero que, además, algunos de esos informes fueron encargados por la Xunta de Galicia, el órgano que manda en las cajas.

Me da igual las fusiones intra-regionales que inter-regionales. Mentira. Quiere las inter-regionales para quitarles el mando a las comunidades y obtenerlo él. MAFO es fuerte con el débil y débil con el fuerte. Porque el mismo reproche que lanza a Núñez Feijoo le ha salido fatal en Cataluña y Andalucía. Con sus correligionarios Montilla y Griñán no se atreve. Así, Montilla le prohibió que le quitara a cualquiera de sus cajas -mucho más necesitadas de intervención que las gallegas- y creó, de la noche a la mañana, 3 fusiones para 9 entidades. Griñán lo mismo, aunque le concede la fusión de Cajasol con Guadalajara... mientras manda Cajasol. MAFO es débil con el fuerte y fuerte con el débil.

Y que no se eche faroles. No puede intervenir todo lo que le venga en gana porque el Gobierno Zapatero, el pagano, no se lo permitiría. Las cajas, a partir de la CCM, no serán apoyadas con dinero del FGD sino del FROB.

Aún hay otro asunto más peliagudo. MAFO apostó por las fusiones virtuales, por los famosos Sistemas Institucionales de Protección (SIP) forma de diluir el poder de las comunidades en favor del Gobierno central y del Banco de España. Por ejemplo, quiere que Caixanova se fusione con las cajas de Canarias y Navarra, que ya han montado su SIP. De esta forma le quita poder a la Xunta a la par que convierte las cajas de ahorros en bancos, en sociedades anónimas, que es lo que pretende: la bancarización de las cajas.

Pues bien, MAFO aseguró que quien entre en los SIP no podrá salir en 10 años, no en dos, como presumía el sector y, con su aire más chulesco, aseguró que no les arrendaba la ganancia para quien pretendiera salirse en ese tiempo. En otras palabras, de esta forma impone las fusiones intra-regionales y las convierte en no recurrentes. No hay marcha atrás. Para MAFO la solvencia de las cajas depende de que las controle el PSOE y, pasando de lo general a lo particular, él mismo.

Por si alguien duda de que este proceso está politizado y teledirigido por el Zapatismo y el primer gobernador con carné, 12 horas después de la charla de MAFO en Vigo, el alcalde de la localidad, el socialista y ex ministro de Felipe González, Abel Caballero, convocaba una manifestación contra la fusión entre Caixa Galicia y Caixanova para el 9 de febrero. De inmediato, fue contestado por sus socios en el Ayuntamiento de Vigo: el BNG sí quiere que Caixa Galicia y Caixanova se fusionen. Quieren que Galicia tenga una institución financiera importante.

Insistimos: el futuro de las cajas de ahorros se dilucida en Galicia. Está claro por qué: la gobierna el PP. Por contra, en Cataluña y Andalucía seguirán mandando las fusiones intra-regionales. Sus correligionarios Montilla y Griñán no están dispuestos a hacerle mucho caso al señor gobernador.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com