Las demandas bolivianas (quieren salir al Pacífico) están afectando a las relaciones de Chile con sus países aliados. Así lo reconoce un informe de la propia Cancillería a la que ha tenido accedo el diario chileno La Tercera.

La Cancillería chilena habla de malas relaciones con Bolivia, llamada a convertirse en uno de los grandes proveedores mundiales de gas, y con la Argentina, que no cumple sus previsiones de suministro energético.

Chile es considerado el país más europeo de toda Hispanoamérica, pero levanta muchos recelos en la zona. En su día, un periódico de Santiago publicó el siguiente titular: Adiós, América Latina, y los ecos del enfado en todo el subcontinente aún no se han desvanecido.