Los síntomas suelen aparecer a partir de la mediana edad, destacando la falta de aire o la tos crónica
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es la tercera causa de muerte en el mundo. Se caracteriza por la dificultad del paso del aire por los bronquios. Hoy en día la padecen uno de cada cuatro fumadores, según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), y no tiene cura, aunque sí puede prevenirse y tratarse. Hay dos millones de españoles que la padecen.
“En 2019 ocasionó 3,23 millones de defunciones, con lo cual se considera un problema de salud global en el que la atención temprana personalizada, junto con el hecho de evitar la exposición a factores de riesgo, resulta primordial para su control y para poder reducir la tasa de mortalidad asociada a esta patología”, explica el doctor Romualdo Roncero, médico de Medicina Familiar y Comunitaria del Hospital Quirónsalud Clideba de Badajoz.
Así, avisa de que la combinación de asma y de consumo de tabaco aumenta el riesgo de padecer la enfermedad. "Las personas que fuman desarrollan la enfermedad y la gran mayoría será EPOC. Por eso los chequeos son claves", sostiene este especialista.
Con un diagnóstico precoz, disminuyen las exacerbaciones e ingresos hospitalarios derivados de esta enfermedad
Dice que hay varios factores que influyen en la aparición de esta enfermedad, principalmente fumar, pero también ser fumador pasivo y respirar humo de tabaco durante mucho tiempo; causas totalmente prevenibles.
Principales Síntomas
Los síntomas suelen aparecer a partir de la mediana edad, destacando la falta de aire, la tos crónica, a menudo acompañada de esputos, y el cansancio: "Es importante que las personas que noten estos síntomas acudan a su médico de familia, dado que el diagnóstico y tratamiento precoces mejoran la calidad de vida de los pacientes y disminuyen su tasa de mortalidad”.
A su vez, defiende que con un diagnóstico precoz disminuyen las exacerbaciones e ingresos hospitalarios derivados de esta enfermedad. Precisamente, señala que estos pacientes suelen padecer una exacerbación de su patología de base, la cual requiere tratamiento específico y temprano para evitar complicaciones requiriendo en algunos casos ingreso hospitalario.
De hecho, mantiene que las personas con EPOC tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas, cáncer de pulmón y otras varias afecciones.
“Esta enfermedad evoluciona gradualmente, a menudo debido a varios factores de riesgo asociados como son la exposición al tabaco por fumar o por exposición pasiva al humo, la exposición profesional a polvos, humos o productos químicos y la contaminación del aire en interiores, entre otros desencadenantes”, agrega el doctor Roncero.
Para el diagnóstico de la EPOC destaca la realización de la espirometría, su “prueba principal”, que dura apenas 10 minutos y es indolora
Diagnóstico de la Enfermedad
Para el diagnóstico de la EPOC destaca la realización de la espirometría, su “prueba principal”, que dura apenas 10 minutos y es indolora. “El paciente debe llenar sus pulmones de aire y posteriormente soltarlo de la forma más rápida que pueda. Esta prueba mide la cantidad y velocidad del aire de los pulmones y revela posibles alteraciones que impliquen EPOC”, resalta el médico de Medicina Familiar y Comunitaria del Hospital Quirónsalud Clideba.
Esta se debe acompañar de una analítica de sangre y de una radiografía de tórax. A través de los resultados de estas pruebas, junto a las escalas clínicas para evaluar los síntomas y la exploración física, "estratificamos a los pacientes según distintos grados de gravedad", apunta el doctor.
La importancia de dejar de fumar
Aunque las vías respiratorias y pulmones dañados por la enfermedad no se pueden reparar, sí se pueden controlar y mejorar los síntomas detectados por el paciente de EPOC, siempre que se tomen las medidas adecuadas, principalmente dejando de fumar. “Es primordial que el paciente abandone el hábito tabáquico. Es una piedra angular del tratamiento y de la prevención de esta patología respiratoria”, apostilla Roncero.
El tratamiento se basa en el uso de fármacos y en el abandono del hábito tabáquico, prosigue este especialista, que indica que entre los fármacos utilizados destacan los broncodilatadores en distintos dispositivos que ofrece el mercado farmacéutico y que hacen que se puedan adaptar de manera personalizada a las necesidades y a las características respiratorias de cada paciente.
Precisamente, el Hospital Quirónsalud Clideba cuenta con una Unidad multidisciplinar especializada en EPOC, en la que intervienen la Unidad de Medicina de Familia, el Servicio de Urgencias, de Neumología y el de Medicina Interna.
En 2019 ocasionó 3,23 millones de defunciones, con lo cual se considera un problema de salud global
"Todos estos servicios están coordinados para prestar una atención integral, especializada y personalizada, en la cual el paciente siempre tiene acceso a los profesionales y recibe un seguimiento exhaustivo de su patología, se encuentre en el estadio que se encuentre”, afirma el doctor Roncero.
Desde SEPAR avisan a todas las personas fumadoras o de más de 40 que hayan fumado que podrían estar desarrollando EPOC. La aparición de tos, de ahogo, de cansancio y tener expectoración pueden ser síntoma de esta patología. Acudir al médico en caso de duda siempre será una buena opción en estos casos.
Contenido patrocinado por: Quironsalud