Las fuerzas de seguridad iraquíes mataron al menos a 14 personas en la ciudad santa chií de Kerbala durante la noche, tras abrir fuego contra unos manifestantes, dijeron fuentes médicas y de seguridad, recoge Swissinfo.

Al menos 865 personas resultaron heridas, según las fuentes. Tres manifestantes perecieron en la ciudad sureña de Nassiriya por heridas sufridas en protestas anteriores.

No obstante, el jefe de departamento de salud de Kerbala dijo que había 122 lesionados, incluidos 66 miembros de las fuerzas de seguridad.

El jefe policial de Kerbala rechazó en una declaración que hayan muerto manifestantes y aseguró que hubo solo un fallecido en un incidente criminal no relacionado. Asimismo, indicó que las imágenes de fuerzas de seguridad disparando a los manifestantes que se viralizaron en las redes sociales son montajes diseñados para "agitar las calles" de la ciudad.

Miles de iraquíes salieron a las calles esta semana, en una segunda ola de protestas contra el gobierno del primer ministro Adel Abdul Mahdi

Miles de iraquíes salieron a las calles esta semana, en una segunda ola de protestas contra el gobierno del primer ministro Adel Abdul Mahdi y una élite política a la que consideran corrupta y alejada de la realidad. La cifra total de muertos desde que comenzaron los disturbios el 1 de octubre se sitúa ahora en al menos 250 personas.

Las manifestaciones, generadas por el descontento por las penurias económicas y la arraigada corrupción, acabaron con cerca de dos años de relativa estabilidad en Irak, que estuvo sometida entre 2003 y 2017 a una ocupación extranjera, una guerra civil y la insurgencia de Estado Islámico.

Irak es un miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y tiene una vasta riqueza petrolera, pero muchos habitantes viven en la pobreza o tienen un acceso limitado al agua potable, la electricidad, el cuidado básico de la salud y la educación.