• Paolo Vasile y Silvio González, al servicio de la vicepresidenta.
  • Objetivo: que Rajoy tire la toalla y lanzar a la primera mujer presidenta del Gobierno de España.
  • Y limpia de corrupción (al menos, el Duopolio no exhibirá sus vergüenzas).
  • Mediaset y Atresmedia le pagan así a Soraya lo mucho que ha hecho por enriquecerles.
  • No como el dimitido Soria, que les tenía fritos.
  • La jefa de Gabinete de la vicepresidenta, María González Pico, 'colabora' con los informativos de A3 TV y Tele 5 en esta fase crucial de la historia.
Lo llaman Conspiración Caracoles, en honor de María González Pico (en la imagen), jefa de Gabinete de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Y es que los padres de Pico, la conspiradora más acreditada de La Moncloa, regentaban el bar Caracoles (los mejores pinchos de bacalao de Aranda del Duero). La almendra de la conspiración es simple: se trata de que, conseguida nueva convocatoria electoral, Mariano Rajoy tire la toalla y Soraya Sáenz de Santamaría sea la candidata del PP a La Moncloa. Ella limpia de polvo y paja en materia de corrupción (al menos, el Duopolio no exhibirá sus vergüenzas y lo que no sale en televisión no existe). Y Pico ha llegado a lo más alto: ahora 'colabora' activamente en la información que sale en Tele 5 y A3 TV, que vuelven a arremeter contra Rajoy, ese político liquidado y, de vez en cuando, contra todos aquellos que, como Margallo, puedan hacer sombra a Soraya. No, La Sexta y Cuatro no colaboran. Eso dos canales pertenecen a la progresía interna dentro del pluralismo interno de los chiringuitos de Berlusconi y de Planeta. En cualquier caso, la norma es la misma para los cuatro canales: a Rajoy estopa, a Soraya ni tocarla. El Duopolio es agradecido. Es mucho lo que Soraya ha hecho por Mediaset y Atresmedia. No como el dimitido José Manuel Soria, que les tenia fritos y que pretendía reducirles los ingresos con medidas antimonopolio como la que mide audiencia y publicidad. Un atentado contra el libre comercio y los libres negocios, naturalmente. El único problema es que Mariano Rajoy está dispuesto a presentarse sí o sí. Pero todo es cuestión de que aparezcan nuevos altos cargos del Gobierno en los Papeles de Panamá (que va a salir). Y aunque no se trata (como en el 'caso Acuamed') de un subordinado de Soraya, no es preocupante: aparecerá en la pantalla del Duopolio como alguien cercano al Presidente y vigilado de cerca por la limpia, limpísima, limpicísima, vicepresidenta. De eso se encarga la Pico. Eulogio López eulogio@hispanidad.com