• Y ojo, porque España sigue siendo clave en la multinacional: aporta el 51% del beneficio.
  • Por fin, Estados Unidos volvió a aportar beneficios Es más se ha convertido en joya de la corona.
  • Se cumplen los objetivos de retribución al accionistas y de reducción de deuda (casi).
  • Con todo, la bolsa no ha recibido los resultados con entusiasmo.

Con la llegada de las presentaciones de resultados de las empresas de energía, se renueva siempre la cantinela de hace ya dos o tres ejercicios, el recurso a culpar de todos los males a la "regulación" del ministro José Manuel Soria. Desde que este gobierno y los que le precedieron, se pusieron manos a la obra para regular el sector y tratar de que el mercado energético sea de libre competencia, se repercuta al consumidor el precio real y desaparezcan las subvenciones a la producción, las cuentas de las compañías del sector ven en la manida "regulación" una tabla de salvación para justificar las fluctuaciones en sus resultados.

Este ejercicio, Iberdrola ha registrado un beneficio antes de impuestos de 3.201,8 millones de euros (M€) frente a los 1.136,1M€ registrados en 2013. Sin embargo, el beneficio neto resulta inferior en un 9,5% al del ejercicio anterior, ya que la sociedad registro un ingreso en concepto de Impuesto de Sociedades.

El crecimiento del resultado bruto se ha debido a la diversificación de negocios de la que hace gala la sociedad, donde el beneficio bruto de España, que aporta un 51% del beneficio total, ha crecido un 2,9% y en especial por la recuperación del negocio en EEUU que ha vuelto al positivo con una aportación de 460,4M€, después de un nefasto 2013 donde se apuntó una pérdida de 1.167M€.

También son positivas las cifras del margen bruto, 12.179,5M€ un 3,4% más que en 2013, así como las del Ebitda, un 3,1% más que el año anterior. Las provisiones y amortizaciones han sido motivo principal del crecimiento del resultado, 1.513,9M€ menos que en 2013, que junto a los 343,9M€ de la venta de activos no corriente, entre los que se encuentra la venta de EDP que ha sido la responsable del menor resultado financiero al no poder contar con los 45M€ que se percibieron en el 2013 por dividendos, hacen que el resultado obtenido se encuentre por encima del objetivo fijado por la compañía para el 2014, a pesar de la caída en un 7,6% del margen bruto en el negocio de las renovables.

La deuda neta de la sociedad se ha visto reducida en unos 1.500M€ respecto al pasado ejercicio y dentro de ella la reducción de la financiera ha sido de 524M€, creciendo la deuda a corto plazo en detrimento de la de largo.

El destino de las inversiones por regiones, ha tenido al Reino Unido como especial destinatario con un 46% del total, seguido por EEUU con un 24% y España con un 18%,la distribución por negocios ha sido de un 54% en redes y  un 27% en renovables.

El resumen por objetivos 2014-2016 de Iberdrola ha sido en general positivo, dando por cumplidos los de Ebitda, beneficio neto y remuneración al accionista y en curso de cumplimiento el de la reducción de la deuda neta que según previsiones ha de llegar a los 25.000M€ en 2016 y que en el 2014 cerró con una cifra de 25.344M€.

Para el ejercicio 2015 algunos de los objetivos de Iberdrola son mantener la retribución al accionista como mínimo en 0,27€ por acción, la amortización de un 2,32% de su capital, y reestructuración de algunos de sus créditos con vencimientos más cercanos ya emprendida en estos días.

Rodrigo de Silos

rodrigode@hispanidad.com