Sr. Director:

La llamada “cultura occidental” está en grave riesgo de desaparecer, y ello -a mi juicio- no por la presión de “otras” culturas -que también-, sino por la deriva que leyes antinaturales llevan a nuestra sociedad a su destrucción.

Quien opine que exagero, considere las “libertades” que nos han dado los sucesivos gobiernos: matar antes de su nacimiento a un ser humano, inventar el matrimonio entre personas del mismo sexo.

No todo son “libertades”. Hay derechos naturales que prohíben o están en ello: es el derecho de los padres a elegir libremente qué educación quieren para sus hijos.

Tras la ley del aborto, probablemente lo más perverso sea la normativa dirigida a la infancia -ninguneando a los padres- para sugerirles que pueden cambiar de sexo solo con “sentirlo”.

Esta desconcertada sociedad occidental no puede extrañar que “otras” culturas se la merienden a corto o medio plazo.