Sr. Director:

Viendo la situación actual de la Iglesia Católica desacralizada en muchos lugares y del estado de caos total que impera en la sociedad, gobernada por los herederos de la Revolución de Mayo del 68, un católico que crea en Cristo como su Dios y Señor, sufre mucho, pues la dolorosísima Pasión y Muerte de Cristo ha pasado a ser un fruto del pasado, ahora lo importante es el hombre. Pero viendo los síntomas apocalípticos que imperan en todos los ambientes, se percibe cada vez con más nitidez, que este imperio de Satanás está llegando a su final. Estaba leyendo el Vía Crucis que se cantaba en mi niñez y juventud, con un unos textos que conmovían hasta el corazón más endurecido, y he llorado, sí, llorado viendo como tanto sufrimiento aún dentro de la Iglesia que El fundo, ni tan siquiera se menciona. Y ¿Qué decir la Divina Eucaristía? Mejor es llorar, rezar y adorar. Esto se acaba, el Gobierno que tenemos es debido a que la Iglesia Católica se mundanizó y desacralizó. La Santísima Virgen María en sus apariciones en Garabandal, (Cantabria), aún no reconocidas por la Iglesia, dijo que cuando creyesen ya sería tarde. Y esa es la situación, ya es tarde. La Santísima Virgen está formando un Ejército, los Apóstoles de los Últimos Tiempos, que avanza imparable por todo el mundo, del cual poco se sabe por que Satanás y sus esbirros, tratan de ocultarlo. El Padre Eterno, viendo el olvido a que han sometido a la Pasión y Muerte de su Divino Hijo, barrerá de la faz de la tierra a estos impíos y malvados que serán sepultados en lo más profundo de los infiernos. Y así se cumplirá el Mensaje que dio la Santísima Virgen en Fátima: “Por fin mi Inmaculado Corazón triunfará”. Triunfo que anuncia la Segunda Venida de Cristo. ¡VEN SEÑOR JESÚS!