Resumen de tertulias y entrevistas en radio y TV (12/11/2019)

En la SER, Juan Marín, de Ciudadanos, y vicepresidente de la Junta de Andalucía, ha dicho: “"En estos momentos gobernamos para más españoles que Pedro Sánchez. Tenemos que hacer autocrítica y recuperar la ilusión del electorado". "Es una cuestión de reconducir algunas de las decisiones que hemos tomado los últimos meses".

Preguntado por si es Arrimadas el mejor recambio para Rivera, Marín respondía: "Para mí, sin duda. Creo que representa todos los valores y principios de esta fuerza política”.

En Onda Cero, Fernando Ónega afirmaba: “No lo tiene fácil, pero tampoco imposible. No lo tiene fácil, porque un partido tiene tres patas: liderazgo, mensaje y base social, y las tres le fallan en este momento. El liderazgo está vacante, el mensaje está diluido por los vaivenes ideológicos y la base social se diluyó con la pérdida de dos millones y medio de votos.

Pero no lo tiene imposible, porque todo es recuperable. Rivera tiene una sucesora natural, que es Inés Arrimadas, que la hemos visto lucir en los debates y disfruta de notable conocimiento público. Déjense de probar otras candidaturas. El mensaje es el que tuvo siempre Ciudadanos. El discurso de Rivera fue bueno, fue lo mejor que tenía y lo deben recuperar.

Y la base social se puede reconstruir si este partido vuelve al centro, no se deja llevar a pactos en los que no gana más que algunos sillones, pero se contamina de extrema derecha. Lo primero, cubrir la vacante. Y después, crear su propia ideología sin entrar en territorios que están ocupados. Lo que les decimos a nuestros hijos: sé tú mismo. Las incursiones por otros escenarios llevan siempre a que se vote al original. Ahora toca atravesar un pequeño desierto.

Si se repiten elecciones, puede ser su final por falta de tiempo y la crisis interna. Si tiene cuatro años por delante para recomponerse, podrá sobrevivir. Y algo que no deben olvidar: cuando vamos a las urnas, necesitamos saber lo que votamos. Y este domingo no lo sabíamos. Eso es lo que tienen que corregir".

En Onda Cero, Carlos Alsina subrayaba: “El único que ha aguantado después de dejar sus votos en la sombra de lo que fueron es Pablo Iglesias, de los cinco millones de 2015 a los tres millones de hoy, pero en su caso la hemorragia ha sido en varias tomas y eso, hasta ahora, le ha salvado. Eso, y que en Podemos siempre encuentran la forma de que parezca que les ha ido bien porque sin ellos el PSOE no alcanzaría ni los 150 diputados.

Lo inusual no es dimitir cuando has hundido tu partido. Lo inusual es irse del todo. Abandonar la política y que no se te vuelva a ver el pelo por una institución pública, como ha anunciado Rivera. Y en eso también tenemos dos ejemplos recientes: Rubalcaba, que se volvió a la universidad, y Rajoy, que se volvió al registro de la propiedad cuando fue derribado en la moción de censura.

Rivera sigue los pasos de ambos pero con veinte años menos. Esta semana cumple cuarenta.

No es exactamente que Rivera se haya ido. Es más bien que los votantes, yéndose ellos, le han echado. La moción de censura que encajó en las urnas fue tan severa, tan demoledora, que no había más camino que el que le devuelve a su casa. Porque Rivera sabe que ha sido su planteamiento tacticista de la política, la sobreactuación de los últimos seis meses, el desconcierto que generó a su propio electorado, lo que explica el hundimiento. Mérito suyo fue el salto de Ciudadanos a la política nacional, los 32 escaños del año 15, la victoria en Cataluña en el año 17, los 57 diputados de abril, y demérito ha sido el desplome que lo ha dejado en sólo diez escaños arrollado por Vox y sin haber conseguido mover ni un milímetro de la Moncloa a quien acabó siendo su bestia negra: el antiguo socio de investidura, Pedro Sánchez”.

En Onda Cero, Rubén Amón lanzaba sus preguntas: “Albert Rivera se marcha con dignidad, al estilo marianista: ni cargo, ni escaño, ni vida política. ¿No deberían secundarle otros líderes y personalidades que han quedado en evidencia el 10N?

¿Os doy ejemplos? Tezanos, Iván Redondo, Pablo Iglesias, Íñigo Errejón y si me apuráis Pedro Sánchez.

¿Quién será el heredero o la heredera de Rivera? El cargo podía ser tentador hace unas semanas, pero ahora es menos atractivo que el banquillo de el Español.

¿Ha sido víctima Rivera del espectro de Adolfo Suárez? De tanto evocarlo y mencionarlo, Cs puede terminar convirtiéndose en Cds. Esta se la debo a Marta.

¿No es una desgracia para la agitada, radicalizada, vida democrática española que se extingan un líder y un partido que representan la moderación?

¿Sobrevivirá Ciudadanos a la orfandad de su padre y líder?

¿No os parece que Rivera se ha sacrificado para intentar salvar el partido y que Sánchez está sacrificando al PSOE para salvarse él?”.

En la COPE, Jorge Bustos señalaba: “Fue un adiós elegante. En la noche electoral algunos rumoreaban que iba a intentar encastillarse en la militancia para agarrarse a los restos del naufragio y nada d es, se ha ido y se ha ido del todo. Se va por completo y además con un discurso que fue especialmente emotivo pero que también lanza señales inquietantes respecto de la voracidad de la política y cómo la política se ha convertido en un lugar inhóspito, que tritura a las personas a una velocidad de vértigo, más allá de los errores que haya cometido. Yo creo que el castigo electoral fue excesivo, también porque muchos de los votos hasta el 46% no sirvieron para conseguir escaños por culpa de la ley electoral. Pero se va dejando un ejemplo y que recupera, paradójicamente, en el momento del adiós el capital político que a lo largo de este año había sido tan destruido”.

David Gistau apuntaba: “Rivera se marchó muy bien, hizo por primera vez el Rivera reconocible que había dejado de ser, pero la política es así. Es un ámbito muy competitivo y voraz en el que el que no resiste se marcha. Y hay gente a la que se daba por liquidada, como Pablo Iglesias, que resiste”. “Más allá de la pena que da siempre el final de alguien o de algo civil o biológicamente en España, Rivera se marcha porque ha sido un desastre lo que ha hecho con su partido en los últimos tiempos, las decisiones han sido equivocadas, han abandonado Barcelona, que era el feudo original donde había crecido este partido cuyo encanto era la oposición al nacionalismo, cualquier otro experimento ha sido o veleidoso o fracasado”. “Y el personaje de Cs, que legó a ganar las elecciones en Cataluña, ya está borrado como tal porque en estas elecciones los constitucionalistas de Cataluña han dejado de confiar en Cs”.

En la COPE, Inocencio Arias afirmaba: “Siento que Rivera se haya marchado, pero es un gesto que le honra, es elegante, y que haya hecho lo que en España nadie se atreve a hacer. Pero yo no pondría mucho el énfasis en los errores cometidos, que los ha cometido”. “Fue valiente en el momento adecuado y jugándose el tipo incluso físicamente. Por lo tanto yo guardaré un buen recuerdo de él”.

Antonio San José explicaba: “Albert Rivera hizo ayer lo único que podía hacer, que es dimitir ante la debacle. Perder 47 escaños de golpe es algo tremendo y creo que es un gesto que le honra pero no tenía otra salida. Ahora le queda un difícil camino a Ciudadanos para encontrar hueco en el actual panorama de la política española”.

En la SER, José María Izquierdo comentaba: “¿Les gustan los cuentos de Navidad? ¿Y los de hadas, unicornios incluidos? ¿Los pastelitos de crema, las tartas con mucho merengue?

Habían conseguido tras muchos esfuerzos reunirse en torno a una mesa políticos de varios partidos, y sumaban con sus teléfonos una y otra vez, pero siempre les daba el mismo resultado. PSOE, 120; Unidas Podemos, 35; Más País, 3. Total: 158. Un señor añadía los 7 votos del PNV: 165. Todavía faltan 11, recordaba otro. Seguro que Revilla colabora y ya tendríamos 166, se oye: faltan diez hasta llegar a la mágica suma de 176 escaños, sin Torra, sin Rufián y sin Batasuna.

En éstas que se abre la puerta, y una señora –o un señor- irrumpe en la sala: "Buenas -saluda- soy el nuevo jefe de Ciudadanos, y comprobado que con el giro a la ultraderecha nos hemos hundido, conscientes además de que nunca hemos servido para nada útil, hemos decidido ayudar para romper el bloqueo: ahí están mis diez diputados".

Entre todos hicieron un programa de Gobierno, fueron muy felices y comieron muchas perdices".