Sr. Director:
Si algún interés tenía la histórica distinción entre Izquierdas y Derechas, era la de ubicar de modo sencillo a los distintos partidos y políticos según sus respectivos principios, medios y objetivos. Y aunque bien sabemos que todo fluye y cambia, hay cosas que han cambiado tanto, que cabe dudar sobre si siguen existiendo unos mínimos contenidos esenciales reconocibles en cada uno de los dos lados políticos.
Pues si bien la Izquierda ha realizado giros extraños llegando a amparar causas que antes incluso combatía (como su simpatía por los micro nacionalismos disgregadores del Estado), es la Derecha la que ha avanzado vertiginosamente en su «evolución», al asumir expresa o implícitamente las leyes ideológicas que previamente aprobó la Izquierda en materias como el aborto, Ideología de género, matrimonio homosexual, violencia de género y hasta Memoria Histórica, que va precisamente contra la media España de donde procede la propia Derecha: aquella que no se resignó a morir a manos de la otra media.
Al menos en España, hoy la diferencia de principios y valores entre Izquierdas y Derechas parece haberse diluido hasta confundirse ambos espectros políticos. La única diferencia se reduciría a la gestión económica... ¿Pero, acaso la Economía es lo único importante?
Miguel Ángel Loma