Un lector me comenta que en nuestra información sobre el ofrecimiento a CiU de dos ministerios (Exteriores y Fomento) no queda claro qué gana CiU con ello. Hombre, por de pronto gana dos ministerios. Pero se ve que mi comunicante es buena persona, y considera que los políticos se desviven por su formación política. No, hombre, no. Los que ganan son los principales impulsores del acuerdo : ganan nada menos que el cargo de ministros, especialmente Duran Leida al que le mola mucho ser el canciller de las españas, un cargo al que ya aspiró con José María Aznar, pero que se encontró con la negativa de Jordi Pujol y sus socios convergentes.
Y tampoco es que a CiU le interese sólo Cataluña. No, a CiU como al nacionalismo vasco y cuanto más nacionalistas, mucho más- les encanta estar en Madrid y en las instituciones españoles. Pero sí, el objetivo de Mas no es Madrid, sino al Presidencia de la Generalitat, que la considera suya por derecho. En eso mi comunicante tiene razón. Ahora bien, insisto, una cosa es lo que interesa a CiU y otra lo que interesa a Mas, aunque los presidentes tiendan a confundir sus anhelos con los intereses de su militancia.
En cualquier caso, el pacto Zapatero-Mas necesita ser definido : Mas le ofrecía ser su socio preferente, participar en el Gobierno de España y apoyarle en el Congreso de los Diputados a cambio de la Generalitat, naturalmente. Ahora bien, Zapatero alega que no es él quien elige al presidente de la Generalitat, sino las urnas y yo no soy quien convoca elecciones en Cataluña, sino Pasqual Maragal, y éste no está por la labor: quiere agotar la legislatura.
De acuerdo, responde Mas (naturalmente yo no estaba allí; es la reconstrucción más lógica de los hechos, a tenor de lo que me cuentan mis fuentes socialistas y convergentes), pero los dos sabemos que si bien Maragall puede agotar la legislatura (noviembre de 2007) es el Partido que nombra candidato, y es el partido quien decide las alianzas. Así, volvamos a la alianza prevista en noviembre de 2003: PSC-CiU. Tú te tienes que comprometer a que vuestro candidato cederá la presidencia de la Generalitat a CiU (es decir, a mí).
¿Qué es lo que conseguía Zapatero? Pues algo muy sencillo : cambiar a ERC por CiU en toda España (salvo en Cataluña). Pero es que es en toda España, salvo en Cataluña, donde Carod-Rovira produce urticaria. No es que los nacionalistas de CiU provoquen entusiasmo, pero al menos son gente civilizada. Y eso es lo que no han dejado de repetirle los asesores de ZP: ERC te quita votos en todo el país y el PP se aprovechará de ello.
Hasta ahí el acuerdo. El único problema vino luego, en la comparecencia de Mas ante los medios informativos. Mas habló de la gobernabilidad de España (es decir, de los dos ministerios y del apoyo parlamentario), pero dejó claro que eso iba ligado a la recuperación de la Generalitat por CiU. Y esto es lo que enfadó a Zapatero : Mas no está dispuesto a darle su cromo hasta que Zapatero le ofrezca el suyo, pero el suyo no puede ofrecerlo hasta noviembre de 2007.
En cualquier caso, Zapatero está que lo tira: no deja de decir que, con el acuerdo con CiU, y de un plumazo, he aislado a Rajoy, jubilado a Maragall, desactivado a González y encauzado a Carod.
Y lo peor de todo, es que tiene razón. Si logra cerrar el acuerdo, la jugada habrá sido de 10 sobre 10.
Eulogio López