El Nuevo Orden Mundial (NOM) actúa ya con desfachatez: ahora Malthus vuelve a ser un ídolo, a pesar de que la sobreproducción del siglo XX le condenara al olvido

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon ha oficializado el sentir en la organización, principal centro de irradiación ideológico del Nuevo Orden Mundial (NOM) o clase dirigente del mundo: "El crecimiento de la población –asegura Ban Ki-moon- provoca una tensión sin precedentes en los recursos del planeta". En definitiva, Malthus vuelve y con él los deseos del NOM y del primer mundo: en lugar de dar de acabar con el hambre se termina con los hambrientos, que es un método mucho más sencillo.

Y esto lo dice después de 50 años de sobre producción alimenticia, donde se han empleado mucos recursos financieros para mantener, artificialmente y en contra del Tercer Mundo. Altos los precios de los alimentos básicos. Ahora que la especulación financiera así como el abandono pasado de tierra de cultivo, así como el proteccionismo occidental frente a la agricultura del Tercer Mundo, han provocado una reducción del número de alimentos, Ban Ki-moon se apresura a pedir que se reduzca la población en lugar de ampliar las tierra cultivables.

Hace Días, El País, el periódico más leído de España calificaba como el mejor economista del mundo al neomalthusiano Joffrey Sachs. Pues eso, que los ricos vuelven a poner de moda a Malthus.

La resurrección de ‘Malthus' a estas alturas de la excedencia productiva tiene su aquel. El tema de la reunión del G8 será "una acción global para salvar el crecimiento global". Como prólogo de la Cumbre del G8, se reunieron los pasados 2 y 3 de julio en Tokio la Conferencia Internacional de Parlamentarios del G8 sobre Población y Desarrollo. Participaron el Fondo para la Población de la ONU (UNFPA), el Banco Mundial y los grupos parlamentarios de Población y Desarrollo de los cinco continentes. Estos grupos dependen de la multinacional abortera IPPF, presente también en las reuniones. Obviamente, la reunión de Tokio se centró en la salud reproductiva (eufemismo del aborto químico y quirúrgico), las Metas y Objetivos del Milenio, el Cambio Climático y los problemas de población y seguridad alimentaria. Lo que le habría gustado a Zapatero asistir.

La conclusión del Fondo de Población es que el G8 "deberá considerar seriamente los problemas de población cuando delibere sobre seguridad alimentaria, cambio climático y las muertes maternas". Añade que "reduciendo los embarazos no deseados (eufemismo de aborto), expandiendo el acceso a la salud reproductiva (aborto encubierto), incluyendo la planificación familiar (otro eufemismo de aborto), ayudaremos a los países a lograr la 5ª Meta del Milenio para el Desarrollo sobre salud materna". O sea, abortismo en estado puro. El suicidio de la humanidad.