• El primero asciende a 32.050 millones hasta julio, es decir, supone el 3,08% del PIB.
  • Buena noticia, pues aún queda lejos el objetivo para el conjunto del ejercicio (3,5%).
  • El responsable: el aumento de la recaudación ( 7,3%), que asciende en los siete primeros meses a 115.825 millones.
  • Sin embargo, la Seguridad Social arroja un saldo negativo porque las transferencias del Estado ya no se concentran en los primeros meses, sino que se reparten en el ejercicio.
  • En el gasto del Sistema, las prestaciones a familias e instituciones suponen el 93,44% y los complementos a mínimos en pensiones contributivas aumentan un 3,45% por mayor número de pensionistas y el incremento de la pensión media.

Los datos conocidos este viernes, correspondientes a la Contabilidad Nacional y a las cuentas de la Seguridad Social (SS), publicados por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas y por el de Empleo y SS, respectivamente, nos dan una de cal y otra de arena.

Los del departamento de Cristóbal Montoro (en la imagen junto a Fátima Báñez) nos dan una alegría, mientras que los del de Fátima Báñez provocan todo lo contrario e incluso cierta preocupación. Y es que los primeros señalan que el déficit público baja un 13%, sin embargo, los segundos presentan un saldo negativo de 2.201,22 millones.

Vayamos con el desglose de los datos de Hacienda. El déficit del Estado asciende a 32.050 millones hasta julio, es decir, supone el 3,08% del Producto Interior Bruto (PIB). Algo que ha sido posible gracias a unos ingresos de 70.468 millones ( 3%) y a unos gastos de 102.518 millones (-2,6%). Esto es una buena noticia, pues aún queda lejos el objetivo para el conjunto del ejercicio (3,5%).

El responsable del descenso del déficit es el aumento de la recaudación ( 7,3%), que asciende en los siete primeros meses a 115.825 millones, casi 8.000 millones que en el mismo periodo de 2013 (107.957 millones). De esta excelente cifra, 42.546 millones ( 5,7%) son ingresos cedidos a las autonomías por participar en impuestos estatales.

En cuanto a los ingresos por impuestos, también hay que hablar del crecimiento, en concreto del 3,8%, gracias a los aumentos de la recaudación del IRPF ( 5,3%) -45.936 millones- y del IVA ( 10,2%) -35.776 millones-. Mientras que el resto de ingresos no financieros ascendió a 16.812 millones, un 33,4% más.

En total, los impuestos directos y cotizaciones sociales, sin descontar la participación de las administraciones territoriales, recaudaron 50.288 millones, similar al importe del año pasado. Los impuestos indirectos ingresaron 48.725 millones, un 8,2% más.

Respecto a los gastos, la cifra se situó en 100.816 millones, un 2,6% menos, por la influencia del descenso de las transferencias corrientes, compensada por los mayores gastos financieros (23.620 millones, un 7,8% más) y de transferencias de capital (4.313 millones, un 72,3% más).

Pasemos a los detalles de las cuentas de la SS. Estas presentan hasta julio un saldo negativo de 2.201,22 millones, que representa un 0,21% del PIB. Una notable diferencia respecto al mismo periodo del año pasado, cuando se registró un superávit de 4.208,5 millones. La explicación se debe a que las transferencias del Estado (13.000,48 millones de euros en el Presupuesto de 2014) ya no se concentran en los primeros meses, sino que se reparten a lo largo del ejercicio. Ahora sus aportaciones sólo el 77,76% de los recursos previstos en el Presupuesto, 11,3 puntos menos que en 2013 (89,09%).

El déficit de la SS es el resultado de unos ingresos de 72.987,2 millones (-4,7%) y unos gastos de 75.188,4 millones ( 3,8%). Se recaudaron 56.761, millones ( 1,1%) en cotizaciones sociales, mientras que el pago de pensiones y prestaciones contributivas ascendió a 67.569,3 millones ( 3,5%). La SS prevé ingresar este ejercicio 102.839,92 millones en cotizaciones sociales por la mejora del empleo, sin embargo no debe perder de vista que cada mes registramos récord en gasto en pensiones y en número de pensionistas y los datos de agosto han sido una bofetada. ¿Lo aguantará el Sistema En Hispanidad, hemos hablado de algunas posibles soluciones en varias ocasiones: sustituir cuotas por IVA para pagar pensiones y subsidios por desempleo, así como fomentar la natalidad con un salario maternal, por ejemplo.

En cuanto al gasto del Sistema, las prestaciones a familias e instituciones suponen el 93,44% y los complementos a mínimos en pensiones contributivas, como era de esperar, aumentan un 3,45%, hasta los 67.580,1 millones, por el mayor número de pensionistas y el incremento de la pensión media. Parece que, sin prisa, pero sin pausa, hay que ir viendo si el Sistema lo podrá soportar durante mucho más tiempo.

Cristina Martín

cristina@hispanidad.com