El laicismo militante, además de intolerante, resulta bastante frío y desmedido. Resulta que tres familias de escolares del colegio público "Palacio Valdés" de Avilés han solicitado al centro que este año supriman el tradicional festival de villancicos por sus "connotaciones religiosas". El laicismo militante ha conseguido arrancar el Misterio de la Encarnación de las felicitaciones navideñas y de las pantallas de televisión. Con eso han conseguido que no sepamos qué celebramos en Navidad más allá de la paga extra.
Pues bien, no contentos con su "hazaña", el laicismo quiere entrar en la escuela, arrancando esa tradición milenaria del cántico de villancicos en Navidad. Y lo más alucinante es que lo han conseguido -de momento- y que los "tolerantes" responsables del centro han optado por suprimir el tradicional festival, suponemos que para no herir los sentimientos de estas tres familias. A cambio, el resto de las familias deberá aguantarse y cantar los villancicos en su casa. Y en voz baja, para no irritar los sentimientos antinavideños de los vecinos.
Dentro de poco, algunos visitantes de Oviedo pedirán a su alcalde que reconvierta la catedral en "single homes" y que reparta la custodia entre los habitantes. Cosas veredes. Si quiere escribir a los responsables del centro "Palacio Valdés", puede hacerlo en la siguiente dirección electrónica:
cp.palacio.valdes1@centros3.pntic.mec.es
