Sr. Director
El mensaje central de la Navidad es que Dios se ha hecho hombre y ha venido a habitar entre nosotros.
En este tiempo de tribulación, hay que responder a la ofensa con la denuncia, el perdón y el anuncio siempre nuevo y sorprendente del Verbo que se ha hecho carne, un acontecimiento cuya Luz se manifiesta y guía a quienes lo acogen con fe, como un misterio de amor. Porque solo quienes se abren al amor son cubiertos por la luz de la Navidad. Así fue en la noche de Belén y así es también hoy, aun en medio de las dificultades.
Domingo Martínez Madrid