No hay nada como abandonar las labores ejecutivas para exigir mayor rigor. Es lo que le ha pasado a Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO), tras su salto a gobernador del Banco de España. Había mucho morbo en cómo valoraría la política económica desde su nueva atalaya habiéndose sido él el responsable de esa política hasta antes de ayer. Pues bien, MAFO pide ahora más liberalizaciones. Ordóñez siempre ha sido un liberal y considera que la desregulación, la apertura de mercados y la transparencia de la administración no sólo nos hará mejores, con mayor calidad democrática, sino también más eficientes económicamente.

Además, según el Banco de España, la economía española creció un 3,8% en 2006. Un crecimiento robusto que es necesario mantener. Y por cierto, superior al norteamericano que se situó en el 3,5%, por encima de lo esperado.