Níjar es el Ayuntamiento con mayor término municipal de toda España. Y como se pueden imaginar, eso da para mucho. Si además, tenemos en cuenta que el término municipal de Níjar incluye el paraje paradisíaco de Cabo de Gata y que toda esa zona está prácticamente virgen de explotación urbanística, el resulta es verde y con asas.
Eso es lo que ha ocurrido. Y era bastante evidente. Los ecologistas llevan años denunciando los excesos municipales. Porque el Parque Natural Cabo de Gata es de los pocos espacios semisalvajes, delicia de los hippies y gente extravagante. Se está construyendo en lugares doblemente protegidos y el término municipal (no sólo Agua Amarga, como señala el ABC en su edición de hoy) es un mar de grúas escandaloso.
El pelotazo de San José (la San Sebastián del Levante, la llaman) ha sido de órdago. Hace 25 años había literalmente- cuatro casas, una sola cabina telefónica y un cartero que conocía a los vecinos por su nombre. El crecimiento ha sido espectacular. El dinero del plástico agrícola se ha destinado al ladrillo en un crecimiento desordenado.
Y por si fuera poco, el ayuntamiento maltrata a los nuevos propietarios. Les cobra una tarifa de agua anual aunque sabe que sólo la utilizan en verano. Y por supuesto, el servicio de recogida de basuras es bastante deficiente. Para eso son veraneantes. En cambio, el pueblo está como los chorros del oro. El suelo de la plaza del consistorio es de mármol. No está nada mal para un pueblo que hasta antesdeayer vivía de la industria tradicional. El turismo desordenado tiene estas consecuencias.