- "Nos negamos a cumplir con lo que habíamos visto como una vigilancia excesivamente amplia y anticonstitucional y desafiamos la autoridad del Gobierno de EEUU", ha dicho el consejero legal de Yahoo, Ron Bell.
- La noticia vuelve a reabrir el complejo debate sobre cuál de los dos derechos debe primar -y cuándo- sobre el otro: el de la privacidad o el de la seguridad.
El consejero legal de Yahoo, Ron Bell (en la imagen), ha denunciado la presión a la que fueron sometidos por el Gobierno de Barack Obama, como parte del programa de vigilancia PRISM de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA). "Nos negamos a cumplir con lo que habíamos visto como una vigilancia excesivamente amplia y anticonstitucional y desafiamos la autoridad del Gobierno de Estados Unidos".
"Consideramos esto una victoria importante para la transparencia y esperamos que estos registros ayuden a promover un debate informado sobre la relación entre la privacidad, el debido proceso y la recolección de (información de) inteligencia", concluye Bell.
Efectivamente, la noticia vuelve a reabrir el complejo debate de cuál de los dos derechos debe primar -y cuándo- sobre el otro: el de la privacidad o el de la seguridad. Pero está claro que todos queremos privacidad.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com