• "Nos negamos a cumplir con lo que habíamos visto como una vigilancia excesivamente amplia y anticonstitucional y desafiamos la autoridad del Gobierno de EEUU", ha dicho el consejero legal de Yahoo, Ron Bell.
  • La noticia vuelve a reabrir el complejo debate sobre cuál de los dos derechos debe primar -y cuándo- sobre el otro: el de la privacidad o el de la seguridad.
Viva el derecho a la privacidad. El Gobierno de Estados Unidos amenazó a la empresa Yahoo con imponerle multas diarias de 250.000 dólares (190.000 euros) si se negaba a entregar datos de sus usuarios, según una serie de documentos -cerca de 1.500 páginas- desclasificados por la Corte de Vigilancia de Inteligencia Extranjera.

El consejero legal de Yahoo, Ron Bell (en la imagen), ha denunciado la presión a la que fueron sometidos por el Gobierno de Barack Obama, como parte del programa de vigilancia PRISM de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA). "Nos negamos a cumplir con lo que habíamos visto como una vigilancia excesivamente amplia y anticonstitucional y desafiamos la autoridad del Gobierno de Estados Unidos".  

"Consideramos esto una victoria importante para la transparencia y esperamos que estos registros ayuden a promover un debate informado sobre la relación entre la privacidad, el debido proceso y la recolección de (información de) inteligencia", concluye Bell.

Efectivamente, la noticia vuelve a reabrir el complejo debate de cuál de los dos derechos debe primar -y cuándo- sobre el otro: el de la privacidad o el de la seguridad. Pero está claro que todos queremos privacidad.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com