La eurozona reconoce que "todas las acciones previas" exigidas a Grecia se han cumplidoEstá claro que la solidaridad de la UE, principio sobre el que fue creada, cada vez brilla más por su ausencia. La UE y el FMI siguen enfrentados sobre cómo reducir el peso de la deuda helena. La institución dirigida por Lagarde insiste en mantener el objetivo de disminuirla desde el 190% del PIB que alcanzará el año que viene al 120% en 2020 y pide a los países de la eurozona que asuman pérdidas en sus préstamos a Atenas.
Sin embargo, los países de la eurozona no quieren una quita a la deuda griega y defienden otras opciones como la rebaja de los tipos de interés o el alargamiento de los plazos. Por cierto, la exposición de España a la quita griega es de 25.000 millones de euros. Pero si queremos que sean solidarios con nosotros en el futuro, habrá que serlo ahora con los griegos.
Por eso, el Eurogrupo y el Fondo Monetario Internacional (FMI) concluyeron esta madrugada sin acuerdo sobre la fórmula para cerrar el agujero fiscal de Grecia en los próximos años y garantizar la sostenibilidad de la deuda helena. Se ha retrasado la decisión hasta el lunes 26 de noviembre. El desembolso del próximo tramo de ayuda a Grecia asciende a 31.500 millones de euros.
Y eso que en un comunicado difundido al término de la reunión, los ministros de Finanzas de la eurozona afirmaron que "todas las acciones previas" exigidas a Grecia de cara al Eurogrupo de hoy se han cumplido, algo que también destacó el ministro alemán, Wolfgang Schäuble, a la salida del encuentro. El comunicado final de la reunión de ministros de Finanzas de los países de la Zona Euro subraya que Grecia ha cumplido "de manera satisfactoria" con las acciones requeridas como condición para el desembolso del nuevo tramo de ayuda financiera. Esas acciones incluían -continúa el comunicado- nuevas y duras medidas de austeridad y un presupuesto severamente recortado, pero asegura que deberán discutirse cuestiones "técnicas".
La excusa de la insolidaridad la puso el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker: "Estamos cerca de un acuerdo, pero todavía deben llevarse a cabo verificaciones técnicas y cálculos financieros que a estas horas no era posible hacer de forma adecuada". No obstante, destacó los esfuerzos realizados por el país heleno. Por su parte, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, explicó que se está "cerrando la brecha" pero que todavía no se ha llegado a un acuerdo. "Hay progreso pero tenemos que hacer un poco mas", resaltó.
Lógicamente, los griegos están desolados. El primer ministro griego, el conservador Andonis Samarás, dijo: "Cualquier dificultad técnica a la hora de encontrar una solución técnica no es excusa para ninguna laxitud o retraso". "Grecia ha hecho todo aquello a lo que se había comprometido. Nuestros socios, incluido el FMI, tienen que hacer también todo aquello a lo que se han comprometido". Pero el comportamiento de la UE nos da pistas de cómo puede ser también ese comportamiento con España, si es que pedimos el rescate...
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com
Sin embargo, los países de la eurozona no quieren una quita a la deuda griega y defienden otras opciones como la rebaja de los tipos de interés o el alargamiento de los plazos. Por cierto, la exposición de España a la quita griega es de 25.000 millones de euros. Pero si queremos que sean solidarios con nosotros en el futuro, habrá que serlo ahora con los griegos.
Por eso, el Eurogrupo y el Fondo Monetario Internacional (FMI) concluyeron esta madrugada sin acuerdo sobre la fórmula para cerrar el agujero fiscal de Grecia en los próximos años y garantizar la sostenibilidad de la deuda helena. Se ha retrasado la decisión hasta el lunes 26 de noviembre. El desembolso del próximo tramo de ayuda a Grecia asciende a 31.500 millones de euros.
Y eso que en un comunicado difundido al término de la reunión, los ministros de Finanzas de la eurozona afirmaron que "todas las acciones previas" exigidas a Grecia de cara al Eurogrupo de hoy se han cumplido, algo que también destacó el ministro alemán, Wolfgang Schäuble, a la salida del encuentro. El comunicado final de la reunión de ministros de Finanzas de los países de la Zona Euro subraya que Grecia ha cumplido "de manera satisfactoria" con las acciones requeridas como condición para el desembolso del nuevo tramo de ayuda financiera. Esas acciones incluían -continúa el comunicado- nuevas y duras medidas de austeridad y un presupuesto severamente recortado, pero asegura que deberán discutirse cuestiones "técnicas".
La excusa de la insolidaridad la puso el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker: "Estamos cerca de un acuerdo, pero todavía deben llevarse a cabo verificaciones técnicas y cálculos financieros que a estas horas no era posible hacer de forma adecuada". No obstante, destacó los esfuerzos realizados por el país heleno. Por su parte, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, explicó que se está "cerrando la brecha" pero que todavía no se ha llegado a un acuerdo. "Hay progreso pero tenemos que hacer un poco mas", resaltó.
Lógicamente, los griegos están desolados. El primer ministro griego, el conservador Andonis Samarás, dijo: "Cualquier dificultad técnica a la hora de encontrar una solución técnica no es excusa para ninguna laxitud o retraso". "Grecia ha hecho todo aquello a lo que se había comprometido. Nuestros socios, incluido el FMI, tienen que hacer también todo aquello a lo que se han comprometido". Pero el comportamiento de la UE nos da pistas de cómo puede ser también ese comportamiento con España, si es que pedimos el rescate...
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com