Moratinos señaló la semana pasada que el Gobierno español compartía con Obama la necesidad de realizar una evaluación de la situación en Afganistán en orden a realizar una operación más efectiva. Entre otras cosas, el canciller español sugería la necesidad de que hubiera una participación más intensiva de la cooperación civil y de la policial.
Previamente había afirmado que no era partidario de incrementar el contingente español porque nuestro país ya había pagado un alto precio en vidas humanas. Pues bien, a Moratinos le han pillado con el carrito del helado, porque resulta que la administración americana ha anunciado el envío de entre 20.000 y 30.000 soldados adicionales al país antes del próximo verano. Lógicamente exigirá un esfuerzo similar a sus aliaos. ¿Qué contestará ahora Moratinos?