- El 73,2% del coste total se destinó a salarios (22.635,56 euros por trabajador) y el 22,2% a cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social (6.859,44 euros por trabajador).
- Los costes laborales en España están en la media europea; mientras que los salarios, muy por debajo.
El coste neto fue de 30.667,43 euros por trabajador -con una disminución anual del 0,7%-, una vez deducidos 238,12 euros en concepto de subvenciones y deducciones recibidas de las Administraciones Públicas para fomentar el empleo y la formación profesional.
Además, el 73,2% del coste total se destinó a salarios (22.635,56 euros por trabajador) y el 22,2% a cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social (6.859,44 euros por trabajador).
Los sueldos y salarios más las cotizaciones a la Seguridad Social constituyeron, conjuntamente, el 95,4% del coste bruto.
Además de los salarios y cotizaciones, 519,97 euros anuales se destinaron a beneficios sociales por trabajador (cotizaciones voluntarias a seguros y planes de pensiones, prestaciones complementarias a la Seguridad Social y gastos de carácter social), 321,59 a otros gastos derivados del trabajo (indemnizaciones por fin de contrato, pequeño utillaje y ropa de trabajo, transporte hasta el lugar de trabajo, selección de personal...), 466,65 euros correspondieron a indemnizaciones por despido y 102,34 a formación profesional.
Como explicamos en su día, los costes laborales en España están en la media europea; mientras que los salarios, muy por debajo.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com