Sr. Director:

Felicidades Luis: Llevas cinco años dando guerra y hoy te lo van a celebrar por todo lo alto. Ayer lo pasamos en grande recorriendo las estrechas calles del pueblo a bordo del coche de tu madre, hasta el merendero y la ermita del pico del monte. Fuiste todo el camino el centro de atención, como una centrifuga que acerca al centro del tambor las mejores sonrisas, esas tonterías que solo hacemos a los niños y las caricias de todos. Tu cerebro es todavía un misterio para nosotros, no sabemos que pasa por tu cabeza, lo que escuchan tus oídos o si llegarás a hablar, correr, escribir o jugar al fútbol como los demás. Pero lo que si se es que eres feliz, que sabes comunicar cariño a raudales y que en esas horas que pase contigo me hiciste olvidar los mínimos problemillas del día a día. No eres un discapacitado, tienes unas capacidades distintas que quizá cuesta apreciar en un mundo que pretende ser perfecto y elimina a los que no entran en su "normalidad" (porque no es curar seleccionar a los enfermos para que no vivan, eso es otra cosa). Tu sonrisa y la atención constante, generosa y fuerte de tu familia es como una bocanada de aire fresco : mientras quede gente capaz de amar así, el mundo seguirá siendo un lugar habitable.

Beatriz García Clavel

beagarvel@hotmail.com