• Ha comenzado a ofrecer a algunos encausados un acuerdo de mínimos: sin prisión y con multas modestas.
  • Y es que saben que no pueden ganar en la cuestión central: los créditos dolosos.
  • Argumento básico: la culpa de la crisis la tuvo el BCE y sus tipos cero.
  • ¿Y en cuanto al Banco de España? Solo le hizo el trabajo sucio al BCE.
  • En paralelo, la nueva tendencia en el cuerpo de inspectores del Banco de España: ocultar su fracaso profesional en la ética.
  • Los informes de supervisión fueron beneplácitos, pero no falsos.
  • Al final los únicos banqueros castigados lo eran por las tarjetas black. O sea, por el chocolate del loro.
  • Y mientras los políticos no se enteran: comisión sobre cajas de ahorros: piedra contra el propio tejado.
Naturalmente no es Jaime Ponce quien ha tomado la decisión pero sí quien la está ejecutando. Y justo cuando va a iniciarse la Comisión sobre crisis bancarias. Como los chicos de Ciudadanos son un poco cortos, se centrarán en las cajas de ahorros. O sea, que no han entendido nada. El presidente del FROB obedece una orden del Gobierno, una especie de ley de punto y final en contacto con el Banco de España, por la que se impone un quehacer -más que una norma- de ley de punto final a la crisis bancaria. Por decirlo de otra forma, el FROB se rinde ante los malos banqueros. Ponce ya ha empezado a ofrecer un pacto a los banqueros encausados o protagonistas de quiebras que han necesitado ayudas públicas. No cárcel, por supuesto, y unas sanciones pecuniarias llevaderas. ¿Y esto por qué? Pues por lo de siempre, porque en el FROB se han convencido de que no pueden ganar las batallas judiciales, de que van a perder casi todas. Para ser exactos perderán las de las 'tarjetas black', el chocolate del loro, pero perderán en la parte sustancial: la concesión de créditos dolosos -naturalmente fallidos-. Es decir, la verdadera razón por la que quiebra un banco y la verdadera razón por la que se hacen millonarios los banqueros. Pero claro, eso es muy difícil de perseguir. Los créditos dolosos son goles a la inspección del Banco de España, cuyo prestigio no está para muchos trotes. Esto por lo que respecta al lado oculto de la fuerza. Pero es que, además, cunde la convicción de que la causa de la crisis bancaria fue la política monetaria laxa, tanto de la Reserva Federal como del BCE. Claro, el Banco de España se vio obligado a seguirle la corriente y mirar hacia otro lado. De hecho, en paralelo, vivimos ahora una nueva tendencia en el cuerpo de inspectores del Banco de España: ocultar su fracaso profesional en la ética. Ejemplo, el caso Bankia. Dos inspectores que ponen en solfa lo que realmente ha ocurrido con la inspección en los tiempos de crisis: los informes de supervisión fueron beneplácitos, pero no falsos. Al final los únicos banqueros castigados lo eran por las 'tarjetas black'. O sea, por el chocolate del loro. Y la Comisión Parlamentaria servirá para llenar muchos telediarios… y para nada más. En resumen, ley de punto final por la que no se perseguirá lo que realmente debía perseguirse. Y una convicción: con tipos bajos este negocio no es negocio. Guindos y Rajoy se rinden ante los banqueros. Eulogio López eulogio@hispanidad.com