Todo eran malas noticias hasta que Francisco González (FG), en la tarde del martes, ha emitido un docto comunicado en el que se muestra dispuesto a colaborar con la justicia con “transparencia y objetividad”. Menos mal, estamos salvados.

Al mismo tiempo, se nos informa, aunque no está claro el conducto, que el juez Manuel García Castellón, en un alarde de brillantez y agudeza sospecha que el BBVA, no FG; sino el BBVA, imputado como entidad jurídica, utilizó los servicios de Villarejo con no muy buenas intenciones.

Considerando que el escándalo surgió el 9 de enero y que estamos a 30 de julio, nadie puede negar que la justicia avanza a pasos agigantados en el esclarecimiento del tema.

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Bromas aparte, ha sido cesado el primer directivo de la época FG y se trata nada menos que de Eduardo Arbizu, uno de los hombres de mayor confianza del expresidente y que llegó a disputar la sucesión al mismísimo Carlos Torres. Para mayor extrañeza, resulta que Arbizu no figuraba entre los imputados por su señoría García Castellón. Arbizu era actualmente el responsable de regulación y control interno del banco y se va tras 17 años trabajando en el grupo, justo un día después de la imputación como persona jurídica del BBVA. Le sustituye Ana Fernández.

Por no hablar del astuto juez Manuel García Castellón: sospecha que el BBVA contrató a Villarejo con no muy buenas intenciones

Pero el cachondeo continúa: recuerden que el presidente del BBVA, Carlos Torres, insiste en que lleva colaborando con la justicia desde el primer momento y que nadie como él busca, al igual que FG, el esclarecimiento de la trama.

Es la luz al final del túnel. Salvo que no sea el final del túnel sino las luces de otro vehículo que circula en dirección contraria y contra el que nos vamos a dar un grandísimo trompazo. Pero esto último sólo es una hipótesis de trabajo. Confiemos en la justicia. Y en FG.

Última hora: cunde por todo el edificio de la Vela el rumor de que el responsable último de la contratación de Villarejo fue el encargado del 'catering' en la planta noble de la entidad por aquel entonces, en la torre de Azca. Seguiremos informando.