Quizá uno de los personajes más fanáticos y crueles de la historia de la humanidad ha sido el prefecto Daciano, encargado de aplicar en España los edictos de Diocleciano, destinados a erradicar el cristianismo del Imperio.
En Zaragoza, donde consiguió el mayor número de mártires de una ciudad perteneciente al imperio romano, se enfrentó al diácono Vicente. Temeroso de que su ejecución pudiera provocar un tumulto, dada la popularidad del futuro santo, lo envió a Valencia. Allí, ante la resistencia de Vicente a renegar de su fe lo extendió sobre el ecúleo o potro y le descoyuntó los huesos, sin que Vicente perdiera el conocimiento, por lo que ordenó que le desgarraran las partes más sensibles de su cuerpo con garfios. Al no conseguir nada lo colocó sobre el enrejado al rojo de una parrilla y le aplicó hierros candentes al resto del cuerpo. Evidentemente, era su amor a Dios y la gracia divina lo que hacía resistir a Vicente, pero el juez creyó que era magia y lo mandó encerrar en un calabozo, y aquel mismo día murió (22 de Enero del año 304).
De San Vicente, uno de los mártires cristianos más torturados físicamente, dice la Colecta de su Misa: "Dios todopoderoso y eterno, derrama sobre nosotros tu Espíritu, para que nuestros corazones se abrasen en el amor intenso que ayudó a San Vicente a superar los tormentos".
El "dolorismo" no cabe en el cristiano sino el amor que da significado y enaltece el sufrimiento. El ejemplo de San Vicente invita a cumplir la voluntad de Dios por amor. En efecto, el cumplimiento diario, durante toda la vida, de la voluntad de Dios, supone, tal vez, mayor heroicidad que soportar por varias horas unos tormentos terribles.
(Las fuentes principales, que no las únicas, de las que se han tomado los datos para redactar la Sección "Hoy no se olvide de felicitar a…", y a cuyos autores se muestra el agradecimiento y reconocimiento debidos, son las siguientes:
Direcciones de Internet: archimadrid. es; churchforum.org; aciprensa.com; encuentra.com; planalfa.es; ewtn.com; serviciocatolico.com; buscabiografias.com; y es. catholic.net.
Libros: Los clásicos de siglos pasados de Santiago de la Vorágine, Ribadeneira y Croisset; "Nuevo Misal Popular Iberoamericano"; Dos mil Años de Santos", Ed. Palabra; "El libro de los santos", Ediciones Internacionales Universitarias; "La casa de los santos", Ed. Rialp; "Los santos del calendario cristiano", Ed. San Pablo; "Il grande libro dei Santi", Edizioni San Paolo; "Gran Enciclopedia Rialp"; "Año Cristiano" Ed. B.A.C; y "Nuevo Año Cristiano", EDIBESA; estas cuatro últimas publicaciones facilitan las mejores referencias bibliográficas sobre San Vicente, Mártir).
Pilar Riestra