La persecución más implacable y general (salvo las Galias y Gran Bretaña), la desató el emperador Diocleciano durante los primeros años del siglo IV. El Papa San Marcelino fue una de sus víctimas en el año 304. Hasta el año 308 no se elige al futuro San Marcelo. Ello es lógico porque la sangrienta persecución impedía reunirse a los obispos. Cesada ésta, el Papa Marcelo fue capaz de recomponer la disciplina y organización de la Iglesia, porque: "La persecución (de Diocleciano), sabiamente dirigida mientras duró, había atacado ante todo la organización misma de la vida de la Iglesia. Sus principales objetivos fueron arrasar los templos y lugares de reunión de los cristianos, quemar los libros sagrados y los documentos de los archivos, y llevar a la apostasía o a la muerte a los sacerdotes, con preferencia a los simples fieles" (Marcelo González).
Los apóstatas conseguidos por Diocleciano, los "lapsi", más que apóstatas convencidos fueron débiles. Las rigurosas penitencias que les impuso el Papa Marcelo para reintegrarse a la Iglesia, parecieron excesivas y produjeron revueltas callejeras en Roma, con muertos y heridos. Majencio, entonces, expulsó a San Marcelo, que murió unas semanas después, el 7 de Enero del año 309. Su pontificado había durado poco más de un año.
La espiritualidad de San Marcelo demostró que el permisivismo en la Iglesia, lejos de atraer a nuevos discípulos produce la defección de los mejores. En este sentido, la historia ha dado la razón a las exigencias penitenciales de San Marcelo para la readmisión de los "lapsi".
(Las fuentes principales, que no las únicas, de las que se han tomado los datos para redactar la Sección "Hoy no se olvide de felicitar a…", y a cuyos autores se muestra el agradecimiento y reconocimiento debidos, son las siguientes:
Direcciones de Internet: archimadrid. es; churchforum.org; aciprensa.com; encuentra.com; planalfa.es; ewtn.com; serviciocatolico.com; buscabiografias.com; y es. catholic.net.
Libros: Los clásicos de siglos pasados de Santiago de la Vorágine, Ribadeneira y Croisset; "Nuevo Misal Popular Iberoamericano"; Dos mil Años de Santos", Ed. Palabra; "El libro de los santos", Ediciones Internacionales Universitarias; "La casa de los santos", Ed. Rialp; "Los santos del calendario cristiano", Ed. San Pablo; "Il grande libro dei Santi", Edizioni San Paolo; "Gran Enciclopedia Rialp"; "Año Cristiano" Ed. B.A.C; y "Nuevo Año Cristiano", EDIBESA; estas cuatro últimas publicaciones facilitan las mejores referencias bibliográficas sobre San Marcelo, Papa).
Pilar Riestra