Este "Doctor apostolicus" italiano, hablaba además de su idioma, el francés, el alemán, el latín, el hebreo, el siriaco y el griego, conociendo de memoria en esta última lengua las Sagradas Escrituras. Nació en 1559 e ingresó en la Orden de los Capuchinos. Desempeñó los más altos cargos dentro de la Orden y destacó por su afán predicador y el don de consejo. La misma facilidad que tenía para conocer diferentes idiomas la tenía para aconsejar a las diversas personalidades con las que se relacionó. Con fama y hechos de sabio, murió en 1619.

 

Una de las enseñanzas de San Lorenzo de Brindisi para la época actual que, tan llena de prisas y solicitaciones de todo tipo, dificulta, en gran medida, el diálogo sereno y permanente con los familiares, amigos y conocidos, y en consecuencia impide transmitir la propia experiencia y las ideas que pudieran ayudar a los seres queridos, es fomentar las tertulias después de las comidas sin compartirlas, por ejemplo, con la televisión.

 

 

 

(Las fuentes principales, que no las únicas, de las que se han tomado los datos para redactar la Sección "Hoy no se olvide de felicitar a…", y a cuyos autores se muestra el agradecimiento y reconocimiento debidos, son las siguientes:

Direcciones de Internet: archimadrid. es; churchforum.org; aciprensa.com; encuentra.com; planalfa.es; ewtn.com; serviciocatolico.com; buscabiografias.com; y es. catholic.net.

Libros: Los clásicos de siglos pasados de Santiago de la Vorágine, Ribadeneira y Croisset; "Nuevo Misal Popular Iberoamericano"; Dos mil Años de Santos", Ed. Palabra; "El libro de los santos", Ediciones Internacionales Universitarias; "La casa de los santos", Ed. Rialp; "Los santos del calendario cristiano", Ed. San Pablo; "Il grande libro dei Santi", Edizioni San Paolo; "Gran Enciclopedia Rialp"; "Año Cristiano" Ed. B.A.C; y "Nuevo Año Cristiano", EDIBESA; estas cuatro últimas publicaciones facilitan las mejores referencias bibliográficas sobre San Lorenzo de Brindisi).

 

 

                                                                                                                      Pilar Riestra