Este monje benedictino inglés, nacido en torno al año 675, es uno de los principales evangelizadores de Alemania. Fue Gregorio II el que le encargó predicar el Evangelio a los pueblos germanos, donde obtuvo abundantes conversiones. Este mismo Papa le nombró Obispo de Maguncia. Además de fundar numerosos monasterios e iglesias, consiguió una completa regeneración y reorganización de
La enseñanza de San Bonifacio resulta de especial actualidad, porque cada vez es más difícil declararse católico y hacer apostolado en algunos países de mayoría católica. Refiriéndose a Europa, escribe Juan Pablo II: "En el Continente europeo no faltan ciertamente símbolos prestigiosos de la presencia cristiana, pero éstos, con el lento y progresivo avance del laicismo, corren el riesgo de convertirse en mero vestigio del pasado. Muchos ya no logran integrar el mensaje evangélico en la experiencia cotidiana; aumenta la dificultad de vivir la propia fe en Jesús en un contexto social y cultural en que el proyecto de vida cristiano se ve continuamente desdeñado y amenazado; en muchos ambientes públicos es más fácil declararse agnóstico que creyente; se tiene la impresión de que lo obvio es no creer, mientras que creer requiere una legitimación social…"
(Las fuentes principales, que no las únicas, de las que se han tomado los datos para redactar
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Libros: Los clásicos de siglos pasados de Santiago de
Pilar Riestra