El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) ha denunciado que se han dado seis actos de apoyo a presos etarras durante las fiestas de Navidad en País Vasco y Navarra. No es la primera vez que esta asociación de víctimas que preside Consuelo Ordóñez (hermana del concejal del PP de San Sebastián Gregorio Ordóñez asesinado por la banda terrorista ETA) denuncia que la izquierda abertzale aproveche festividades para apoyar a terroristas, pues, por ejemplo, lo hizo el pasado verano.

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Ahora Covite critica que hubo un olentzero (personaje que representa a un carbonero mitológico que trae regalos el día de Navidad en las regiones de Navarra y País Vasco) proetarra en Oiartzun (Guipúzcoa) que portó un cartel a favor de la excarcelación del etarra Joanes Larretxea. Se trata del terrorista que fue condenado por el asesinato del empresario Ignacio Uría. También en Lesaca (Navarra) se utilizó al olentzero para pedir la excarcelación de los etarras responsables del atentado contra la T4 de Barajas, que acabó con la vida de Diego Armando Estacio Sivisapa y Carlos Alonso Palante Sailema.

La asociación de víctimas del terrorismo también ha denunciado el pasacalles que se produjo en Villabona (Guipúzcoa), donde con el apoyo de EH Bildu se reclamó la excarcelación de los etarras Manex Castro, Juan Carlos Besance Zugasti y Óscar Celarain. Covite recuerda que Castro fue condenado por el asesinato del empreario Ignacio Uría, Besance fue condenado por el asesinato del concejal de UPN José Javier Múgica Astibia y Celaráin fue condenado por los asesinatos de la niña Silvia Martínez Santiago y de Cecilio Gallego.

La asociación que preside Consuelo Ordóñez también ha denunciado la mesa de Nochebuena que puso Sortu con tres sillas vacías en Galdácano (Vizcaya) para simbolizar a los etarras Francisco Javier García Gaztelu ‘Txapote’, Jon Bienzobas y José Ignacio Cruchaga, los cuales están condenados por asesinato. ¿Por qué no se acuerdan de la misma manera de las 856 sillas vacías que dejaron los asesinatos de la banda terrorista ETA? 

Otro acto que pidió la excarcelación de etarras (en concreto, de Garikoitz Arruarte, Jurgi Garitagoitia, Fernando García Jodrá y Arkaitz Agirregabiria) se produjo en una concentración en el barrio de Santutxu en Bilbao. Y en Pamplona (Navarra), los disidentes de Sortu se concentraron para reclamar la amnistía de los etarras, sobre todo, de Patxi Ruiz, responsable del asesinato del concejal de UPN Tomás Caballero, al grito de “¡No habrá paz sin amnistía!”.

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Covite vuelve a criticar que la izquierda abertzale (Sortu, EH Bildu -uno de los socios del socialista Pedro Sánchez y el segundo partido más votado en el País Vasco tras el PNV-) y sus satélites (Sare Herritarra) sigue pidiendo más impunidad para los presos de la banda terrorista ETA, los cuales continúan beneficiándose de terceros grados «fraudulentos»… de los que el Gobierno vasco no informa. Recientemente, la consejera de Justicia y Derechos Humanos del País Vasco, la socialista María Jesús San José, que ha prometido más “transparencia” en política penitenciaria, se ha negado a responder a Covite qué presos de ETA han disfrutado o están disfrutando del programa del artículo 117 del Reglamento Penitenciario.

Recuerden que a principios del pasado noviembre, Covite denunció la concesión de terceros grados «fraudulentos» a los presos etarras Gurutze Agirresarobe Pagola, Itziar Alberdi Uranga, Jurdan Martutegi Lizaso y Juan Jesús Narváez Goñi, adscritos a la órbita de Sortu... y que esta organización califica como «presos políticos». Covite criticó que el Gobierno vasco concedió sus terceros grados ignorando la exigencia legal de mostrar signos inequívocos de arrepentimiento. “No se puede estar con la izquierda abertzale y estar arrepentido, puesto que se lo prohíben expresamente desde hace muchos años, y se encargan de recordarlo públicamente cada cierto tiempo”, denunció entonces Consuelo Ordóñez, presidenta de Covite.