Esta mañana había sido citado a declarar en la Audiencia Nacional el empresario Víctor de Aldama, investigado en el caso Koldo por los contratos de mascarillas en plena pandemia, que fueron adjudicados a la presunta trama de corrupción por el Gobierno canario del que entonces era presidente el actual ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres.  

Y lo ha hecho con material para aportar al juez Ismael Moreno, instructor del llamado caso Koldo, después de que este autorizase a la UCO a devolverle dos dispositivos móviles en los que almacenaba datos y documentos. 

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Cuando ha terminado su comparecencia ante el juez, a la salida del juzgado, Aldama se ha dirigido a los periodistas: "Ángel Víctor Torres tiene que estar preocupado". Y ha adelantado que "pronto" saldrán pruebas sobre el ministro. 

De su declaración en la Audiencia Nacional ha trascendido que mantuvo dos reuniones, en el año 2020, con Torres, en los meses de julio y agosto.

Aldama también ha insistido en que los 10.000 euros al mes que pagaba por entonces a Koldo García -el chico de los recados para todo de José Luis Ábalos y del PSOE- "abrían todas las puertas". "Incluido en el tema de Canarias".