La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha advertido este jueves de que “caerá el peso de la ley” sobre Uber Eats ante los “incumplimientos” de la Ley Rider que “presuntamente” está llevando a cabo la multinacional en España: “Uber no nos va a tomar el pelo al Gobierno de España y ya les anticipo que caerá el peso de la ley sobre esta empresa ante los incumplimientos que está manifestando en nuestro país”.
Así de tajante ha estado Yoli en la presentación del 'Plan Estratégico de la Inspección de Trabajo 2025-2027', que fue aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 26 de agosto, y "que contempla un considerable incremento del presupuesto del organismo para adaptarlo a las necesidades y retos del contexto social y económico".
Y ustedes se preguntarán, ¿a qué se va a destinar ese considerable incremento de presupuesto? Pues, a perseguir a las empresas lanzándoles a los Inspectores de Trabajo.
"La Inspección tiene hoy 2.482 efectivos de inspección, 460 efectivos más que en enero de 2020. En poco más de una legislatura hemos aumentado un 23%, situándonos en la cifra más alta de su historia", ha asegurado la vicepresidenta en la Escuela de la Inspección. Y es que el organismo tiene previsto incrementar el número de efectivos, tanto en las inspecciones provinciales como en los servicios centrales, incorporando un mínimo de 500 nuevos Inspectores de Trabajo y Subinspectores Laborales en el periodo 2025-2027.
"En lo que llevamos de año, la Inspección ha realizado más de 859.517 actuaciones inspectoras; ha detectado 46.000 falsos autónomos; ha recuperado para las personas trabajadoras salarios dejados de percibir por importe de 33,5 millones de euros; ha transformado 26.000 contratos temporales en contratos indefinidos; y 33.000 contratos fijos discontinuos en indefinidos ordinarios". Y no se crean, que Yoli no se prenguta el por qué de estas cifras, ni piensa ne la posibilidad, por ejemplo, de cargarse las cuotas, que lo único que hacen es precarizar el empleo al recurrir a la economái sumergida. Tampoco cuestiona si es necesaria una bajada en los impuestos que pagan las empresas, para incentivar la contratación y las mejoras laborales. No, nada de eso, ella se limita a seguir sangrando a los empresarios y a investigarles.
Además de para esta persecución, el aumento de presupuesto también se destinará a aumentar el número de empleados públicos, algo que le encanta a este Gobierno: "en los próximos años también está contemplado un refuerzo de la plantilla de personal técnico y administrativo".
"En nuestro país no cabe el empleo sin derechos", ha rematado la ministra de Trabajo. Muy bien dicho Yoli, aunque tus datos de empleo te desmienten, porque los contratos temporales, los fijos discontinuos y los de tiempo parcial no dejan de crecer.