La pasada semana les contamos los planes chulísimos, que diría Yoli, de la ministra Isabel Rodríguez. Compareció a petición propia en el Congreso de los Diputados para hablar de su fantástica Ley de Vivienda. Y, entre otras cosas, la titular de vivienda dio su negativa a la barra libre en el mercado de la vivienda, mientras avanzó que esta misma semana se firmará con la Generalitat de Cataluña un protocolo para que dicha Comunidad gestione 13.000 viviendas y más de 300 solares en distintos estados de disponibilidad que pertenecían a la Sareb. Esa era la gran idea de su plan, junto a la habilitación de un teléfono para que la gente pueda informarse sobre temas relacionados con la vivienda. Pocas ideas más, demostrando una vez más el fracaso en materia de vivienda del Gobierno.
Hasta ahí la parte socialista del Ejecutivo, pero es que también tenemos a la podemita-sumarita, Yoli, quien ya propuso quitar las ayudas fiscales a los propietarios que alquilan su vivienda y un nuevo impuesto para gravar el 25% de la compra, para continuar con la Desamortización de Yoli: nacionalizar las viviendas amenazadas de desahucio y expropiar viviendas en desuso de entidades bancarias y fondos.
Ante las propuestas, no sabemos con qué ala del Gobierno quedarnos, pero se ve que los de Sumar son de ver la paja en el ojo ajeno y, a su parecer, ellos han dado con la solución y el PSOE, es decir, Isabel Rodríguez, no.
De ahí que la portavoz de Sumar en el Congreso, Verónica Martínez Barbero, haya sugerido este martes a la ministra de Vivienda, que si sigue sin asumir que se necesitan medidas "serias, innovadoras y valientes" para atajar la crisis de precios debería "dejar paso" a alguien que sí esté dispuesto a impulsar este tipo de políticas, porque tanto a su grupo como a la ciudadanía se les está "acabando la paciencia" con esta ministra.
Lo ha dicho en una rueda de prensa en la Cámara Baja en la que ha mostrado su "decepción" con la comparecencia de Rodríguez: "No se puede venir al Pleno del Congreso a proponer como medidas estrella teléfonos de la esperanza en un asunto como este, y menos aún, cuando tiene sobre la mesa una serie de propuestas, las que hicimos desde Sumar".
"No se puede seguir ni un minuto más con un ministerio que se llama de Vivienda, esperando que se adopten medidas que tengan algún efecto en los precios de la vivienda". "Si ella no tiene ideas, ahí tiene las nuestras", ha insistido.