El nuevo Plan Estratégico de Iberdrola 2025-2028, presentado este miércoles en Londres, confirma la apuesta de la eléctrica por el negocio regulado de redes, principalmente en Reino Unido y EEUU, mercados con seguridad jurídica y con una rentabilidad media del 9,5%. En España, la rentabilidad del negocio de redes no supera el 6,5%.
Un plan estratégico ambicioso pero que, sin embargo, no despeja la principal incógnita de la compañía: la sucesión de Ignacio Sánchez Galán, que el próximo martes 30 de septiembre cumplirá 75 años, una edad estupenda para pasear y jugar a la petanca.
No es ninguna broma: la sucesión es un punto crítico para el futuro de la eléctrica. No es lo mismo que el nuevo presidente ejecutivo sea continuista o, por el contrario, opte por un rumbo distinto. Y si hay algo que no le gusta al mercado es la incertidumbre.
Galán, eso sí, ya se ha preocupado de colocar a su familia, como les hemos ido contando en Hispanidad. El último, su hijo Pablo que, además de ser el pequeño, es ingeniero, frente a su hermano Ignacio y a su cuñado David Mesonero, ambos directivos de la compañía y licenciados en Administración y Dirección de Empresas.
Durante la celebración del Capital Markets Day -el día del inversor de toda la vida- Galán volvió a arremeter contra el cierre nuclear en España. “La Comisión Europea ya está contemplando que lo nuclear es verde y en muchos países están alargando la vida con un coste adicional pequeño”, afirmó.
Otro asunto que preocupa en el sector es la delicada situación de la red que, según Galán, “está saturada al 90%”. “Queremos seguir ayudando al país, pero hay que ser realistas”, señaló, para luego criticar a la CNMC por bajar la retribución de las líneas de alta intensidad. “Si el regulador no está en línea con la política del Gobierno tienen que resolver esas diferencias”, afirmó.. “Si no hacemos inversión en España podemos llevarla a otro sitio que nos genere mejores retornos”, concluyó.
Lo más destacado del nuevo Plan es el aumento del 30% de las inversiones brutas respecto al plan anterior, que alcanzarán los 58.000 millones de euros, que se dice pronto. Inversiones destinadas, principalmente, al negocio regulado de redes (37.000 millones). Los 21.000 millones restantes irán al negocio de renovables y cliente, de los que el 38% se destinarán a eólica marina, el 24% a eólica terrestre, el 10% a solar y otro 10% a almacenamiento.
Por países, la perra gorda se la lleva Reino Unido, con 20.000 millones de euros, seguido de EEUU, con 16.000. A la Península Ibérica destinará 9.000 millones, a Brasil, 7.000 y los 5.000 millones restantes se repartirán entre Australia y otros países europeos.
En la recta final de la sesión bursátil, Iberdrola baja un 0,5%, frente a un Ibex plano, en el -0,01%. Este Markets Day no pasará a la historia. La duda es si lo hará la dinastía Sánchez Galán.