Resultados de IAG y castigo del mercado. En las cuentas de la aerolínea no me voy a meter porque ya lo hizo, estupendamente, Cristina Martín, ayer, pero sí en la reacción de los inversores a las cifras.
Caídas, al cierre de esta información contundentes y cercanas al 10%, para sus títulos. Explican algunos expertos que estamos ante un valor alcista a largo plazo, también lateral porque cotiza a los mismos niveles que en 2020, y que experimenta grandes vaivenes además de giros absolutamente imprevisibles para resumir, dicen, que no merece la pena estar en valores que actúan de esta manera.
Y me ha venido a la mente, en ese momento, que es así, precisamente, como se comporta un chicharro. Es cierto que estamos hablando de una de las empresas más importantes del Ibex 35, con un volumen de negociación diario contundente, pero… quizá IAG, que cotiza en el Nasdaq, pudiera ser calificada de esa manera por el principal mercado del mundo, por Wall Street.
Así que, me fui a consultar a la IA de Google, para ver qué decía al respecto y….¡menuda defensa de la aerolínea que se ha marcado la inteligencia artificial!
Aquí les dejo su respuesta a mi pregunta concreta: ¿es IAG un chicharro del Nasdaq?
“IAG no es un "chicharro" en el Nasdaq, sino una acción de una gran empresa cotizada en formato ADR (American Depositary Receipt) bajo el símbolo ICAGY.
Un "chicharro" es un término para acciones de baja capitalización con alta volatilidad, mientras que IAG, a pesar de sus fluctuaciones, es una aerolínea de gran tamaño. La cotización de su ADR, a noviembre de 2025, se situaba alrededor de los 10,83 $2.
“Detalles de IAG en el Nasdaq”
- Símbolo: ICAGY
- Tipo de valor: ADR (American Depositary Receipt), que son certificados negociables en EE.UU. que representan acciones de una empresa no estadounidense”.
“Diferencia con un "chicharro”
Chicharro: Se refiere a acciones de empresas de baja capitalización bursátil, a menudo especulativas y con alta volatilidad.
IAG: Es un conglomerado multinacional de aerolíneas, con un tamaño y una capitalización mucho mayores, por lo que no encaja en la definición de "chicharro".
“En resumen, aunque la volatilidad pueda llevar a comparaciones, IAG cotiza en el Nasdaq como ADR y es una acción de una gran compañía, no un chicharro”.
Solo le ha faltado añadir al final…, “no es un chicharro… imbécil”.
Ahí queda eso.
El doble rasero de Meta: muy cuidadosa para censurar mensajes... mientras le cuelan publicidad fraudulenta
Hablamos de una investigación realizada por Reuters basada en documentos internos de la compañía de Mark Zuckerberg. Meta recibe el 10% de sus ventas totales en 2024, unos 16.000 millones de dólares, de publicidad con anuncios fraudulentos.
En concreto, se trata de promociones de comercio electrónico e inversión, casinos en línea ilegales y la venta de productos médicos prohibidos. Publicidad con la que se bombardea a los usuarios aproximadamente unas 15.000 millones de veces cada día, nada más y nada menos.
Una de las conclusiones del análisis realizado por la agencia de noticias es que "es más fácil publicitar estafas en las plataformas de Meta que en Google".
En la documentación Meta reconoce que estudia cuánto supondría, económicamente, reforzar su lucha contra los anuncios fraudulentos frente al coste de las sanciones económicas impuestas por los gobiernos por no proteger a sus usuarios.
Anda que no es listo Zuckerberg… eso sí, Meta es mucho más diligente a la hora de censurar mensajes y medios, tal y como ocurrió en Hispanidad. Por una crónica sobre el Gobierno, en ese momento, de Mariano Rajoy, en la que se hablaba de la obra cumbre de Agatha Christie, Diez Negritos, expresión empleada en el artículo como metáfora de los ministros caídos y como presagio de los que iban a caer, Facebook nos censuró por "racistas".
Quizás no se habían leído Diez Negritos pero el título, en su estúpida concepción políticamente correcta, les sonó a racismo.
El último gran reto de Cobas. “Compra como siempre, ahorra como nunca”
Hablamos de la app lanzada por Cobas pensiones, la gestora de fondos de pensiones liderada por Francisco García Paramés, Cobas Plus, en colaboración con la tecnológica canaria Neopension y que "redefine la manera de entender el ahorro para la jubilación".
Bajo el lema “Compra como siempre, ahorra como nunca”, el objetivo es ayudar a las personas a ahorrar de forma “sencilla y consciente, pensando en su futuro”.
La aplicación se ha desarrollado como un sistema de cashback por el que se puede recuperar parte del dinero de las compras en comercios como Amazon, Mapfre, Decathlon, Adeslas, Holaluz, AliExpress o MásMóvil (entre otros más pequeños) e invertirlo directamente en los planes de pensiones individuales de Cobas.
Según ha explicado la gestora de Paramés, “en un contexto en el que más de siete millones de personas cuentan con un plan de pensiones en España, pero más de cinco millones no realizaron ninguna aportación en 2024, Cobas Plus pretende responder a una problemática social cada vez más evidente convirtiendo el consumo en una oportunidad para construir un capital que garantice una jubilación digna y sostenible".