La crisis del automóvil continúa haciéndose cada mes más profunda al sumar más circunstancias negativas al contexto. Y ojo, el sector ya apunta a que la recuperación del mercado no se dará en 2022 y habrá que esperar al menos otro año, al tiempo que pide al Gobierno rebaja de impuestos.

Así se puede ver entre las declaraciones de los directores de Comunicación de las principales patronales de un sector que aporta el 11% del PIB, representa el 60% de la industria y su cadena de valor tiene unos 1,9 millones de empleos directos e indirectos. Tania Puche, desde la Asociación de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), ha pedido que “más allá de bonificaciones para compensar la subida de precios” (los famosos 20 céntimos por litro combustible), el Gobierno debería “reducir al mínimo el IVA del carburante” y “poner en marcha un esquema fiscal que no grave la compra del coche para evitar así penalizar la renovación del parque y la consecución de los objetivos de descarbonización”. Recuerden que el pasado 1 de enero subió el Impuesto de Matriculación...

Las ventas caen un 30,2%, a 59.920 turismos y todoterrenos, siendo un 51% inferiores a las del mismo mes de 2019; y en el primer trimestre, a 164.399 (-11,6%), la mitad que en el mismo periodo de 2019. Y ojo, el canal de alquiladores recorta sus entregas más de un 63%

A las dificultades que ya existían por la crisis de suministro de materias primas, la crisis de chips, el alza en los precios de la energía y el conflicto en Ucrania, se han sumado la huelga del transporte y la subida de los carburantes. Todo ello ha lastrado las ventas de coches en marzo, registrando la cifra más baja en dicho mes de la serie histórica, según ha destacado Noemi Navas, desde la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac): han caído un 30,2%, a 59.920 turismos y todoterrenos, siendo un 51% inferiores a las del mismo mes de 2019; y en el primer trimestre, las ventas acumuladas se han situado en 164.399 (-11,6%), la mitad de las que había en el mismo periodo de 2019. Y ojo, porque el canal de alquiladores ha recortado sus entregas un 66%, a 6.715 unidades, en marzo; y un 63,8%, a 12.141, en el acumulado en los tres primeros meses, en vísperas de la Semana Santa, cuando normalmente aprovechaban para renovar sus flotas.

Desde Faconauto (patronal de las asociaciones de concesionarios oficiales), Raúl Morales, ha aludido a que ha sido un trimestre “peor de lo esperado” y que “la falta de oferta es lo que hoy condiciona más el mercado”. Eso sí, lo que más les preocupa es que, “con el impacto de la guerra de Ucrania y una situación macroeconómica cada vez más deteriorada, sea la demanda la que pueda fallar”, aunque, “los pedidos en los concesionarios mostraron todavía en el mes de marzo un ritmo razonable”. 

Las ventas de electrificados, híbridos y de gas bajan un 8,4%, a 24.738, en marzo, aunque suben un 21,5%, a 70.072, en el primer trimestre. Y dentro de estos, los híbridos no enchufables siguen siendo los preferidos 

Por su parte, las ventas de vehículos comerciales ligeros han caído un 46,5% en marzo, hasta 9.635, y un 35,8% en el primer trimestre, a 26.023. Mientras que las de vehículos industriales y autobuses han crecido un 3%, a 2.245, en marzo y un 6,1%, a 6.554, en el acumulado del año. Y en el caso de los electrificados, híbridos y de gas, las ventas bajan un 8,4%, a 24.738, en marzo, aunque suben un 21,5%, a 70.072, en el primer trimestre. Dentro de estos últimos, destacan las ventas de electrificados (eléctricos puros e híbridos enchufables -tienen una batería grande que se recarga por el motor de combustión y también mediante un enchufe-), que han aumentado un 17,6%, a 6.859 en el tercer mes, y se han disparado casi un 71%, a 19.098 en el trimestre. Claro que los híbridos convencionales o no enchufables -tienen una pequeña batería que se recarga por el motor- siguen siendo los preferidos entre los alternativos: sus ventas han bajado un 13,2% en marzo, a 16.755, aunque han subido un 12,7% en el primer trimestre, hasta 47.565, representando una cuota de mercado del 24%. Además, se han desplomado las ventas de vehículos de gas un 40% en marzo y un 20,5% en lo que va de año, y se han registrado ya 10 matriculaciones de vehículos de hidrógeno.

 

Parece que 2022 también se va a poder calificar como annus horribilis, al igual que ha sucedido en 2020 y 2021.