Hace unas semanas les hablamos de una pelea entre okupas que acabó con un muerto. El edificio okupado donde ocurrió todo es propiedad del Ayuntamiento de Badalona. Lleva okupado varios años por 200 personas y la intención del Alcalde de la ciudad, Xabier García Albiol, es desalojarlos, pero la normativa española no se lo pone fácil. El propio García Albiol reconocía que "El Ayuntamiento de Badalona hace dos años que está atrapado en procedimientos judiciales para recuperar este edificio municipal, procedimientos que la actual legislación ralentiza y eterniza", un proceso que tachó de calvario judicial interminable.

Albiol aseguraba que "Lleva mucho tiempo advirtiéndo" sobre los posibles riesgos que corre este antiguo instituto okupado, y a la muerte del okupa se sumó otra noticia. El Departament de Salut de la Generalitat admitió a La Vanguardia que diez personas residentes dieron positivo en tuberculosis y han sido debidamente tratados por lo que “no existe, ni ha existido riesgo de contagio". Es más, aseguraron que no puede llamarse brote... porque son solo diez contagios. 

Albiol aseguraba el desalojo. Esto provocó que los okupas dieran una rueda de prensa, donde acusaron al popular de de "discriminación" y de "sembrar el odio" entre los vecinos. Durante la misma, los okupas, acompañados de asociaciones pro-okupacion, exigieron una "alternativa habitacional" tras el desalojo y amenazaron con que, si Albiol lo lleva a cabo sin ofrecerles un realojamiento posterior, no "desaparecerán", sino que okuparán "otro espacio". 

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Tras estas declaraciones y, acercándose la Navidad, los okupas volvían a convocar a la prensa y tachaban a Albiol de "racista" y de tener una "política asesina". El alcalde respondía: "No es racismo, es ir en contra de los delincuentes".

Ahora el ambiente se ha vuelto a 'calentar',  y estos amables okupas agredieron brutalmente este domingo, 30 de noviembre, a dos periodistas. El propio alcalde lo ha contado en el plenario municipal celebrado en el Ayuntamiento.

Se trataría de un reportero y un cámara del programa Espejo Público de Antena 3. La cámara ha acabado destrozada y a uno de los periodistas le han roto el brazo. 

Los vecinos tuvieron que darles cobijo en el portal para “evitar que fueran linchados”, por lo que Albiol asegura que los echará del edificio "a la que el juez dé la orden". "No los quiero en Badalona".