La noticia del día es que Begoña Gómez, la esposa y financiadora de la carrera política de su esposo, será sometida a juicio, por jurado, por cuatro presuntos delitos alrededor de su frenética actividad monclovita.
El juez Juan Carlos Peinado, no ha hecho más que empezar sus cargos contra la esposa del presidente y aunque la pareja Sánchez-Gómez, así como otros socialistas, han intentado apartarle del caso, que son varios sumarios, los tribunales le han dado la razón... al juez, no al presidente del gobierno.
Una semana dura para Sánchez, dado que ya tiene encausados a sus principales colaboradores, a su fiscal general del Estado, a su hermano y ahora a su esposa.
Ahora bien, falta algo para lograr el premio gordo, que no es otro que el suplicatorio por imputación al propio prediente del gobierno. Quiero decir, todos los casos que se siguen en los juzgados de primera instancia, en la Audiencia Nacional y en el Tribunal Supremo, han mostrado que el entorno del presidente es inmoral, pero con Air Europa se puede mostrar que el propio presidente rescató Air Europa con dinero público... y eso es ilegal.
Y claro, ¿puede mantenerse en el Gobierno un presidente imputado? Pues hombre, todo es posible con un ególatra como Sánchez, que carece de límites de cualquier tipo, pero eso ya sería... demasiado hasta para Sánchez.
Es la agonía de un régimen: falta el suplicatorio de Sánchez... y lo más probable es que llegue por Air Europa, caso que analizan: la UCO para dos instancias judiciales distintas, Peinado y el Supremo… por el momento.