Cuando a los líderes europeos no se les ocurre nada, surge alguien que propone: mutualicemos la deuda pública. Es decir, emitamos a escote y repartamos la responsabilidad de devolver capital e intereses entre los 20 países miembros de Eurolandia.
Les recuerdo que, por mor del Covid, esa veintena de estados se endeudaron en exceso y pasaron de una media conjunta del 86% de deuda sobre el PIB, hasta el 97%. Para financiar, entre otras cosas, los fondos de recuperación.
Entonces ¿por qué España ha visto reducida su deuda?: la suya sí, pero la mutualizada sigue en aumento y los fondos los tendremos que devolver, al menos en un 60%, con intereses... y tendremos que pagar en un futuro la deuda mutualizada.
En otra palabras, si la Unión Europea pretende ser un solo país, un solo Estado, debe contar con una deuda común. Un solo país debe contar con una única deuda.
Ahora bien, lo que es malo, muy malo, es la deuda. La única deuda pública buena es la que no existe.