Interior firma con Huawei un contrato de 12 millones de euros para el almacenamiento de las escuchas judiciales.
Huawei es más que una empresa; es el brazo tecnológico del régimen chino. Por eso todo Occidente le tiene vetado. Todo, menos Pedro Sánchez. Este mismo mes de julio, Interior ha adjudicado a Huawei el almacenamiento de las escuchas judiciales por 12 millones de euros. Lo llamativo no es la cantidad, sino el contenido: ¿abrirle la puerta al régimen chino a las escuchas judiciales españolas? Mucho.
Telefónica supuestamente rescindió las relaciones con Huawei precisamente porque sus vínculos con el régimen convertirían a Telefónica en una marioneta. Sin embargo, ha mantenido a Huawei en el mantenimiento de escuchas sensibles. Y eso se ha producido después de la toma de control de Telefónica por parte del Gobierno. Blanco y en botella.
Estados Unidos advierte del riesgo para la seguridad nacional que tiene el hecho de tener al 'enemigo' metido hasta la cocina. A Sánchez le da igual. Quizás porque no es su enemigo, sino su socio estratégico, su 'back up' si todo se tuerce.