Esto es bello e instructivo porque de esta manera todos los credos podrán hermanarse en el muy religioso altar de Naciones Unidas, ¡oh sí!

El hecho de que sea la ONU la que lo organiza ya debería ser razón suficiente para darse de baja. Ese tufo sincretista de la celebración conjunta, también me ahuyenta.

Ahora bien, la parte nuclear es el concepto mismo de Fraternidad. Sí, para el cristianismo todos somos hermanos pero sólo porque somos hijos de Dios. No hay hermanos sin padre. La Iglesia no es una tela de araña, es una catedral gótica, donde todos los miembros está unidos entre sí pero miran hacia la cúpula. Lo básico del cristianismo no es que seamos hermanos sino que tenemos un padre, que es Dios.  

Además,si no tuviéramos padre no seríamos hermanos. ¿Verdad señores obispos? No vaya a ser que con tanto sincretismo, más que hermanos acabemos siendo primos.